En diez días, el autor de Abril Rojo tuvo que aprender uno de los números coreográficos de ‘Tótem’, el espectáculo que la compañía presenta en 19 ciudades del mundo.
El escritor y periodista peruano Santiago Roncagliolo pasó recientemente por una experiencia única. Durante diez días, se integró al elenco del Circo del Sol para un riguroso ensayo general. En este tiempo, el autor de Abril Rojo se sometió a un duro entrenamiento de baile para Tótem, una nueva producción de la compañía. También tuvo que aprender a producir su imagen como la de un verdadero artista circense.
“Voy a hacer una coreografía. Una de Bollywood. Con toques de kárate. (…)El problema es que no he bailado en mi vida. Ni en las fiestas. Soy un castigo danzando. Mis amigos me llaman ‘el asesino del ritmo’”, contó. Toda la vivencia fue narrada a modo de crónica por el mismo Roncagliolo en un reportaje publicado por El País. A este se suma un video que resume su proceso de aprendizaje.
Esfuerzo máximo. Los entrenamientos iniciaron en Montreal (Canadá) y continuaron en Bruselas (Bélgica). En total, la presentación motiva una gira por 19 ciudades del mundo. Próximamente, el 10 de noviembre, el espectáculo se estrenará en Madrid. Sin embargo, Roncagliolo solo participó del ensayo final en la capital belga junto a los 46 profesionales que componen Tótem. La danza que debió aprender Roncagliolo duró solo un minuto y medio dentro del número. Un minuto y medio que le costó bastante esfuerzo.
“Un entrenador ruso me hace firmar una declaración que exonera al Circo del Sol de toda responsabilidad en caso de que yo muera o sufra lesiones de por vida. Antes de poder reaccionar, estoy sentado en un aro colgado de una cuerda. Y me suben. Hasta lo más alto. Chillo de pánico”, explica en el texto. Finalmente, tras ensayo y error, clases de maquillaje y disciplinadas prácticas, el escritor puso a prueba lo aprendido. No obstante, el capitán del equipo de barras rusas, el mongol Tamir Erdenesaikhan, le advirtió que requiere mayor preparación.

Si bien el autor no tuvo que realizar temerarias acrobacias en el ensayo, sí practicó algunos saltos con esponjas como soportes de caída.Fuente: El País

Roncagliolo también debió aprender a maquillarse para el número que tuvo asignado. Fuente: El País

"Mi instructora me cuenta que ha oído a algunos artistas llorar su frustración en los baños", escribe Roncagliolo.Fuente: El País

El escritor destacó el importante reto que la experiencia le significó. "No voy a saltar sobre la barra rusa. Sólo voy a bailar un minuto y medio. Sin embargo, para mi nivel, eso ya constituye un reto sideral".Fuente: El País

"Lo único que delata la relación (de mi personaje) conmigo es el bulto que le brota debajo del pecho. En el mundo real no soy especialmente panzón, pero con este traje parezco embarazado", bromeó Roncagliolo.Fuente: El País

La sede del Circo del Sol de Montreal se extiende por 75 mil metros cuadrados.Fuente: El País
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