Señaló que esperan que Consejo Económico y Social, que elaborará estudios para la implementación de políticas públicas, siente las bases para lograrlo.
La Cámara de Comercio de Lima expresó su confianza en que el gobierno del Presidente Ollanta Humala consolide los avances registrados por el Perú en los últimos años y continúe con las reformas estructurales para impulsar un crecimiento con inclusión y que logremos convertirnos en un país del primer mundo hacia el año 2021, cuando se celebre el segundo bicentenario de nuestra independencia nacional.
La CCL saludó el compromiso del Presidente Humala para promover el progreso social, priorizando educación, salud y nutrición infantil, para lo cual se enfatizará la inversión en infraestructura y en la construcción de hospitales y colegios.
El gremio empresarial expresó su disposición al nuevo gobierno para contribuir a regularizar la informalidad y a impulsar medidas que contribuyan al desarrollo de los emprendedores peruanos.
La Cámara de Comercio de Lima consideró que el Consejo Económico Social, que elaborará estudios para la implementación de políticas públicas, permitirá adoptar medidas consensuadas entre los diversos sectores de la sociedad a favor de la productividad y la competitividad del país.
“Expresamos nuestra disposición para colaborar activamente en el Consejo Económico y Social, aportando análisis técnicos, que se enmarquen en los principios de libertad económica y respetando el marco jurídico vigente”, dijo el gremio empresarial.
En ese sentido, consideró necesario que dicho Consejo Económico y Social analice en su primera sesión las medidas anunciadas por el Presidente Ollanta Humala. Toda vez que estarán reunidos en dicho Consejo trabajadores, empleadores y autoridades tanto regionales como nacionales, se analizarán la viabilidad de las medidas que tendrán impacto en el desarrollo económico del país, como la creación de empresas estatales, entre otras.
Finalmente expresó su respaldo a los anuncios que efectuó el Presidente Humala respecto a la lucha frontal contra la corrupción y la informalidad, que son aspectos fundamentales de la reforma que necesita el Estado para elevar nuestros niveles de institucionalidad y nos preparará para convertirnos en un país del primer mundo en el año 2021.
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