Delincuentes se camuflan bajo la fachada de gremios sindicales para exigir a los responsables de la obra el pago de cupos o puestos de trabajo para sus ´agremiados´.
Un importante número de medianas empresas de la construcción pagan alrededor del 2% del valor de la obra a delincuentes que los extorsionan a través de un serie de amenazas y hostigamientos, reveló la Cámara Peruana de la Construcción (Capeco).
Su asesor en temas de violencia en obra, Gral. PNP (R) Víctor Gandolfo, explicó que los extorsionadores se camuflan bajo la fachada de gremios sindicales para exigir a los responsables de la obra el pago de cupos o puestos de trabajo para sus “agremiados”.
“Si bien son empresas que no están agremiadas en Capeco, conocemos de la situación. Las inmobiliarias atacadas optan por pagarles un determinado monto y mantenerlos lejos de sus construcciones”, señaló a RPP Noticias.
Indico inmobiliarias grandes (en su mayoría afiliadas a Capeco) han reforzado las seguridad de sus construcciones, cuadruplicando el número de vigilantes.
“Si en el 2009 una obra demandada contar con un vigilante, ahora esta misma construcción cuenta con cuatro agentes de seguridad. Esto genera un costo adicional tomando en cuenta que cada custodio cobra S/. 9 la hora”, anotó.
Minutos antes el gerente de proyectos de la inmobiliaria los Portales, Juan Carlos Campana, reveló que hay constructoras que se ven en la necesidad de presupuestar un monto adicional para pagar cupos a extorsionadores.
“Cuando ya tienen conocimiento de que una empresa va a construir los delincuentes se presentan primero a solicitar empleo y luego piden cupos, si el empresario o constructor no acceden empiezan amenazarlos y hostigarlos”, expresó.
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