Ante la reciente fusión de Mifarma e Inkafarma, que concentrarán el 95% de cadenas farmacéuticas, regresa el debate sobre una ley que evite la formación de monopolios.
La reciente fusión de las cadenas de farmacias Mifarma e Inkafarma, que a partir de hoy concentrarían el 95% de cadenas de farmacias, ha generado opiniones diversas.
Por un lado, el Defensor del Pueblo, Walter Gutiérrez, calificó esta compra como una "concentración peligrosa"; mientras que voceros de Intercorp señalan que tras la nueva adquisición la firma solo concentrará el 18% del total de farmacias, poco más de 2,000 famarcias contra las más de 11 mil "boticas de barrio".
No hay ley
Son dos las iniciativas que actualmente buscan establecer el control de fusiones y adquisiciones en el Perú. Por un lado, el congresista Yohny Lescano presentó en octubre del 2016 un proyecto que ley que buscaba establecer un control previo de fusiones, luego de que se oficializara la fusión de SAB MIller y AB Inbev, dueñas en el Perú del 99% del mercado de cerveza.
En ese mismo momento, el congresista Jorge del Castillo presentó una moción para debatir la necesidad de una ley que revise si este tipo de prácticas comerciales podían afectar a los consumidores.
Cinco años antes, el ex congresista Jaime Delgado también presentó un proyecto de ley similar, que establecía un umbral para que este tipo de regulación se aplique sobre transacciones de fusiones que involucren más de 100 mil UIT (actualmente S/405,000).
Legislación actual
Para la abogada Tania Zúñiga, especialista en temas de fusiones y adquisiciones, la actual legislación no otorga a ningún organismo del Estado la facultad de evaluar las transacciones de fusiones y adquisiciones en el país.
“Actualmente el Perú tiene una política de competencia incompleta, la autoridad de competencia no puede pronunciarse, autorizar o evaluar una operación de concentración empresarial, por cualquiera de las modalidades contractuales, para poner definir los efectos de estas operaciones en el mercado relacionadas con el consumidor y con el proceso competitivo", explicó a RPP Noticias.
¿Riegos?
De acuerdo con el decano del Colegio de Farmacéuticos, Javier Llamosa, si esta concentración deviniera en un abuso de posición de dominio de estas empresas podría afectar a la industria farmacéutica no solo por el lado de los consumidores, sino también de las boticas de barrio, a quienes se les podría asfixiar con precios bajos.
"Más allá de subir precios, también es riesgoso bajar precios, porque podrían ahogar a pequeñas boticas de barrios y desaparecerlas", comentó.
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