Según datos provisionales al cierre, ese índice bursátil se situó en 6.762,98 unidades, mientras que el mercado Nasdaq perdió casi un 4%.
La Bolsa de Nueva York cerró
con un descenso del 4,2% en el Dow Jones Industriales, que bajó a niveles que
no registraba desde abril de 1997, en una jornada decepcionante para las financieras
y en la que
Ese índice bursátil, que
incluye a algunas de las mayores empresas estadounidenses, restó 299,64 puntos
y finalizó en 6.763,29 enteros.
El mercado Nasdaq retrocedió
el 3,99% (-54,99 puntos), hasta 1.322,85 enteros, y el selectivo S&P 500
cedió un 4,66% (-34,27 puntos) y finalizó en 700,82 unidades.
La bolsa neoyorquina aceleró
poco antes del cierre un descenso que ya se percibía intenso en los inicios de
la jornada, y que lo llevó a perder el nivel de 7.000 puntos nada mas comenzar
las contrataciones, algo que no había ocurrido desde octubre de 1997.
La depreciación que sufrían
las entidades financieras presionó un día más a la baja al Dow Jones, mientras
que otras empresas de materiales básicos como Alcoa o del sector industrial,
como General Electric y General Motors, contribuyeron también a que ese índice
finalizara en niveles que no registraba desde hace casi doce años.
Las acciones de Citrigroup,
con un descenso del 20%, fueron las que más se depreciaron entre las 30
empresas del Dow Jones de Industriales, y terminaron a 1,20 dólares.
Bank of America y American
Express perdieron en torno al 8% y JPMorgan retrocedió el 7,4%.
En cuanto a General Electric
y General Motors, sus acciones se depreciaron en torno al 10,7% en ambos casos,
mientras que Alcoa, retrocedió casi un 12% y Caterpillar, la mayor empresa del
mundo de maquinaria pesada, se desvalorizó alrededor del 10%.
Las fuertes pérdidas en esos
sectores y también en el de energía, que retrocedió en su conjunto el 7,5%,
ilustran las sombrías perspectivas de la economía para este año, que ha
obligado a algunas compañías como GE e International Paper, entre otras, a
anunciar fuertes recortes del dividendo que abonarán a sus accionistas para
reservar capital.
También se conoció hoy que
la actividad manufacturera en EE.UU. se contrajo en febrero, por décimo tercer
mes consecutivo, y que se deteriora más el empleo en ese sector, según datos
del Instituto de Gestión de Suministros (ISM, por sus siglas en inglés).
El índice de actividad se
situó el mes pasado en 35,8 puntos, comparado con los 35,6 puntos de enero,
según esa entidad.
El gasto en construcción
descendió un 3,3% en enero, el doble de lo que esperaban los analistas y superó
el descenso del 2,4% que se registró el mes anterior, según cálculos que
difundió hoy el Departamento de Comercio.
Ese mismo departamento
informó además de que el gasto de los consumidores de EE.UU. subió el 0,6% en
ese mes, el primer aumento en seis meses, y los ingresos aumentaron un 0,4%.
Esos últimos datos frenaron
por unos momentos el descenso bursátil en los comienzos de la jornada, pero no
lograron disipar la inquietud que generan algunos de los principales bancos de
EE.UU. o grandes empresas como AIG, con una notable implantación mundial.
El anuncio de esa y otras
ayudas se conocían el mismo día en que la aseguradora anunciaba una pérdida
histórica trimestral de 61.700 millones de dólares, debido en gran medida a
cargos extraordinarios.
El barril de crudo de Texas
se depreció hoy un 10,3% y cerró a 40,15 dólares en el mercado de materias
primas, mientras que los bonos de la deuda pública a diez años subían de
precio, situándose su rentabilidad en el 2,87%.