Según un estudio, el 10 % de los brasileños con menores ingresos se repartía el año pasado apenas el 0,7 % de la producción de riqueza nacional.
El 10 % de los brasileños concentraba el 43,3 % de la riqueza del país en 2017, según un informe oficial divulgado este miércoles, que pone de manifiesto que los abismos sociales y las desigualdades persisten en la primera economía latinoamericana.
El estudio fue elaborado por el Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (Ibge, oficial) y detectó que, el año pasado, el 10 % de la población con menores ingresos se repartía apenas el 0,7 % de la producción de riqueza nacional.
Asimismo, indicó que, debido a la crisis económica que se desató en el país en 2015, el rendimiento medio mensual de los brasileños cayó de 2,124 reales (624 dólares hoy) en 2016 a 2,112 reales (621 dólares) en 2017.
La inequidad no se reduce en el gigante sudamericano
De acuerdo al informe, si bien ligero, eso supone un proceso de empobrecimiento que tiene relación directa con la aguda crisis que provocó una caída del 7 % en el Producto Interno Bruto (PIB) entre 2015 y 2016, con fuerte impacto en los niveles de renta y empleo.
Según el Ibge, en 2017 solamente el 60,2 % de la población, que representa unos 125 millones de personas, tenía ingresos atribuidos al trabajo o a otras fuentes como pensiones, programas asistenciales del Gobierno o rentas, como el alquiler de inmuebles.
"El gran dato de esta investigación es que Brasil continúa siendo un país muy desigual y que esa desigualdad persiste y no se reduce", indicó el especialista en estadísticas Cimar Azeredo, coordinador del equipo del Ibge que realizó el estudio.
Por esa razón, señaló que el índice Gini, utilizado para medir las desigualdades en las sociedades, se mantuvo en 2017 en el mismo nivel del año anterior (0,549), que ubica a Brasil entre los países con mayores abismos sociales en América Latina. (EFE)
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