El actor de recordadas novelas mexicanas recurrió a las redes sociales para pedir apoyo en la búsqueda de nuevas oportunidades laborales ya que desde 2012 no tiene un papel fijo en televisión.
“Ya no tengo mánager, pero tengo algo más poderoso, tengo al público”, escribió el actor mexicano Armando Araiza en su cuenta de Instagram donde le pide ayuda a sus seguidores para encontrar trabajo. “Ustedes me han visto actuar desde niño y saben lo que puedo hacer en pantalla”, continuó.
Como se recuerda, Araiza participó en reconocidas novelas mexicanas como Contra viento y marea (2005), Mi pecado (2009), Llena de amor (2010) y Abismo de pasión (2012); sin embargo, no está pasando por un buen momento económico así que recurrió a sus redes sociales para continuar con su carrera artística.
“Estoy disponible para actuar. Si conoces un director, productor o creador, etiqueta, comparte. Si tú crees en mí yo te invito a que me representes y que hagamos ruido juntos porque el artista también se rearma”, escribió en su perfil.
Muchos de sus colegas comentaron, entre ellos, Sebastián Rulli, con quien compartió roles en Contra viento y marea: “Seguro que pronto llegará el personaje perfecto para ti. Todo mi cariño y admiración querido Armando. Te abrazo fuerte”. Tras ello, Armando Araiza no dudó en agradecer a todos los que compartieron la publicación:
“Yo quiero agradecerles a todos porque inmediatamente todos empezaron a pelotear, me dicen 'Oye, vamos a hacer estas menciones', 'Oye, yo tengo estos contactos', 'Oye, yo tengo esta marca', 'Oye, vamos a hacer esta serie'… Entonces es padrísimo tener celebridades, público, amigos, gente que no había visto hace mucho tiempo nos volvemos a conectar”, sostuvo.
Armando Araiza: “Vergüenza es rendirse”
Luego de que recibiera críticas por estar buscando trabajo en redes sociales, Armando Araiza, quien no tiene un personaje fijo en una telenovela desde 2012, respondió a estos comentarios.
“Yo soy una gente trabajadora, de una familia trabajadora y me encanta, entonces por eso me diversifico y hago pódcast –esto lo produzco, el pódcast, soy ahí un comunicador–, después hago conferencias, después hago mentorías uno a uno. Yo me refiero a actuar. Yo me voy a morir actuando y contando historias”, dijo.
“La puerta del éxito es muy ancha y todos cabemos en ella solamente que es muy chaparra (pequeña). Hay que agachar a veces la cabeza y tener la humildad de tocar puertas, de esforzarse, de aprender, de sacrificarse, de autoemplearse y de hacer que las cosas sucedan”, apuntó.
Asimismo, Armando Araiza mencionó que no le da pena pedir trabajo a sus 55 años. “A veces pedir apoyo se malinterpreta como debilidad, yo lo veo como valentía. Trabajar y buscar oportunidades no es vergüenza, vergüenza es rendirse”, finalizó.