Bono, el líder de la banda irlandesa U2, logró visitar la ciudadela inca de Machu Picchu, que consideró ´impresionante´, tras escapar del asedio de la prensa.













Al parecer, el famoso cantante logró camuflarse entre un grupo de visitantes, para ingresar solo a las ruinas, mientras que su familia lo siguió al poco rato acompañado de otros turistas.
Cuando ya se encontraba casi a la mitad del recorrido por el sitio arqueológico, los reporteros y fotógrafos lo descubrieron y fueron a su encuentro, según constató Efe en el lugar.
El líder de U2 se mostró muy atento con los periodistas y turistas que se acercaron a saludarlo y tomarle fotografías, y llegó a asegurar que Machu Picchu "es un lugar impresionante".
Bono llegó la mañana de sábado, junto a su familia a Machu Picchu, pero en ese momento no pudo recorrer las ruinas, al parecer molesto por el asedio de la prensa y los turistas.
Los miembros de su seguridad señalaron que se trataba de "una visita privada". A su salida manifestó que nunca pensó que la ciudadela era así y que le gustaría volver. "I love Machu Picchu", declaró a la Agencia Andina.
El líder de U2 regresó entonces al pueblo de Aguas Calientes, en la zona baja de la montaña en la que se encuentran las ruinas, donde permaneció hasta que, en un momento no determinado, volvió a subir y logró Escapar de la prensa.
El músico llegó el viernes a la ciudad del Cuzco, en el sur de Perú, y por la tarde recorrió la zona del Valle Sagrado de los Incas.
"Muchas gracias amigos. He venido con mi familia y estamos descubriendo un país maravilloso. Estoy con mi familia, espero que entiendan", señaló Bono a los periodistas cuando llegó a Cusco.