Isabel Preysler en Perú: ¿qué es ser 'socialité'?

Mario Vargas Llosa e Isabel Preysler están en Lima. La presencia de la socialité, exmodelo filipina y madre del famoso cantante Enrique Iglesias ha despertado interés en la alta sociedad española y los medios de prensa. El término 'socialité' ha sido acuñado en páginas web, medios impresos, redes sociales, entre otros, y todos lo utilizan, pero ¿qué significa?

Un poco de historia. Etimológicamente, 'socialité' es la unión de las palabras "social" y "élite", entonces quiere decir que estos forman parte de la 'élite social' de una determinada ciudad o país. La palabra fue instaurada por el publicista neoyorquino Louis Keller, quien en 1886 publicó el 'Social Register', un libro con una lista de nombres y direcciones con los contactos de aquellos privilegiados que formaban la clase alta de Estados Unidos. 

Las celebrities y su inclusión. Los personajes famosos irrumpieron en la 'high life' americana cuando en 1956 la actriz Grace Kelly se casó con el príncipe Rainiero de Mónaco. La apertura de la mítica discoteca Studio 54 en el corazón de Manhattan, en 1977,  también fue un punto de encuentro para que el 'jet set' coincida con actores, cantantes, artistas y se relacionen entre ellos.

En este mítico centro nocturno se recuerdan las épicas juergas de la princesa Carolina de Mónaco, y la actriz Diane Brill, bautizada por Andy Warhol como la 'reina de la noche'.

Y esto, ¿es un trabajo? No se reconoce oficialmente al ser una socialité como una labor remunerada. En sus orígenes, las chicas eran socialités para vincularse con gente de alta alcurnia y con un círculo social símil para conseguir pareja. Con los años, el término ha cambiado de propósito y puede llegar a ser muy rentable para quienes se dedican luciendo su vida privilegiada.

Muchas marcas pagan hoy en día millones de dólares para que los personajes más populares del mundo asistan a sus eventos, o si usan sus marcas, pueden generarle mucha rentabilidad. Recordemos que Isabel Preysler tiene jugosos contratos con la revista ¡Hola! solo por entrevistas o fotos de portada. Además cobra 20 mil euros por asistir a un evento, según el periodista español Javier Otero.

Socialités de nuestros tiempos. Con los años, la imagen de las socialités se vio mucho más expuesta y marcada por escándalos mediáticos que incrementaron su fama. Las dos más populares son Kim Kardashian y Paris Hilton. Ambas, herederas de enormes fortunas y vidas desenfrenadas.

Kim, la más famosa del clan Kardashian, es hija del fallecido y exitoso abogado Robert Kardashain. Su primer salto a la fama se dio con su video pornográfico junto a su entonces pareja, el cantante Ray J. Ese estallido de popularidad devino en convertirla en estrella de redes sociales y sus pasos son seguidos al detalle por paparazzis y millones de fans en el mundo. Tiene su propio reality, actuó en películas destruídas por la crítica, ha lanzado su propio perfume, su propio videojuego... en otras palabras, hace de todo pero nada en verdad relevante.

Paris es heredera del imperio de hoteles Hilton, también tuvo su propio video pornográfico que la catapultó en la cumbre de la popularidad. es actriz secundaria en varias películas, lanzó un disco de música, es dueña de 14 marcas de perfumes y sus excentricidades son seguidas por millones. Otro caso de una socialité que hace de todo, pero nada.