El conductor cómico atravesó por momentos de mucha angustia, tras que su hijo sea diagnosticado con problemas cardíacos.
Duro momento atraviesa el conductor estadounidense Jimmy Kimmel tras el nacimiento de su segundo hijo este pasado 21 de abril y lo que debería ser una linda noticia, se convirtió en una angustiante espera. El pequeño de nombre William llegó a este mundo con problemas cardiacos, por lo que tuvo que ser intervenido de inmediato.
El comediante no salió en su programa la semana pasada, ni se conocía la razón hasta que él mismo decidió salir al frente y explicar lo que estaba ocurriendo. "El lunes por la mañana, el doctor Vaughn Starnes tuvo que abrir su pecho y arreglar uno de los dos defectos que tenía su corazón.” Contó con mucha angustia el reconocido personaje.
“Entró en el quirófano con un bisturí y se puso a hacer una clase de magia que jamás comprenderé o sabré explicar. Abrió la válvula y la operación acabó siendo todo un éxito. Pero han sido las tres horas más largas de toda mi vida" narró Kimmel mientras controlaba sus emociones en la presentación de un nuevo programa.
Para felicidad del conductor de la pasada edición de los Premios Oscar y su esposa Molly McNearny, William está en casa y totalmente curado. "Está genial, come bien, duerme bien, se ha hecho pis encima de su madre mientras le estaba cambiando el pañal. Básicamente está haciendo todas las cosas que se supone que debe hacer", expresó Kimmel.
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