Una de las medidas tomadas por el club fue ir dejando a los jugadores cerca de sus domicilios. Además el bus que trasladaba al plantel abandonó el aeropuerto por una salida alterna.
Los jugadores de Alianza Lima regresaron de Argentina y esquivaron tanto a hinchas como a periodistas desde su llegada al aeropuerto Jorge Chávez, el cual abandonaron en bus por una puerta alterna.
Durante el camino, varios jugadores fueron bajando en diferentes paraderos. El primero en descender fue el volante Julio Landauri en el cruce de las avenidas Faucett y San José. El último fue el técnico Guillermo Sanguinetti junto a su comando técnico en Miraflores.
El único que declaró a la prensa fue el portero George Forsyth, mientras que los demás no quisieron declarar.
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