En el tiempo que estuvo en cancha, el 'Chaval' estuvo muy lejos de su mejor nivel y sus chances de llegar al Mundial de Rusia cada vez son menores.
Cristian Benavente era el jugador que todos los hinchas querían ver con la camiseta de Selección Peruana. Su buen nivel en el Sporting Charleroi acompañado de goles junto a la presión mediática y de fanáticos hizo que Ricardo Gareca lo llame para esta fecha FIFA doble, donde tuvo la oportunidad de ingresar en el segundo tiempo tanto en la victoria por 2-0 sobre Croacia y 3-1 ante Islandia.
Sin embargo, más allá de los resultados positivos conseguido por el combinado bicolor, Benavente fue uno de los puntos más bajos del equipo peruano en ataque durante esos dos cotejos. Tuvo poco contacto el balón y, en repetidas ocasiones, se lo terminaban quitando o daba un pase errado. Por momentos, se le veía ubicado en una posición en la que estaba muy tapado y no figuraba como una opción de pase para sus demás compañeros, sin lucir muy intenso al intentar desmarcarse. Además, se le notaba poco agresivo al disputar pelotas divididas y sin mucha velocidad. En sí, tuvo muy poca participación en la ofensiva y estuvo muy lejos de mostrar el desempeño que muestra cada semana en la liga belga.
Si bien en el compromiso frente a Croacia tuvo que ser sacrificado por la expulsión de Yoshimar Yotún, siendo trasladado a la banda izquierda a raíz de tener un hombre menos, lo cierto es que su producción pudo haber sido mucho mejor en líneas generales. Se le notaba muy ansioso y tenso, como si tuviera una obligación enorme de tener que demostrar un desequilibrio abismal. Es cierto que no es justo que solo haya tenido 50 minutos para ganarse un cupo para el Mundial cuando otros elementos han tenido más de 4 partidos completos, pero la realidad también es que la responsabilidad recaía únicamente en él para que le enseñe a todo el mundo lo productivo que podía ser con la camiseta nacional.
¿Le habrá faltado tiempo para entenderse con sus compañeros? Es algo que él mismo podría responder. Pero por algo ha sido el primer cambio de Ricardo Gareca en ambos cotejos, por encima de Paolo Hurtado que también juega en su puesto: significa que se ganó la confianza del 'Tigre' en los entrenamientos. Sin embargo, ¿eso le bastará para ser convocado al Mundial? Es algo muy difícil de responder, más aún teniendo en cuenta lo sorpresiva que pueden ser algunas decisiones del técnico nacido en Buenos Aires.
En Sporting Charleroi ha mostrado su capacidad para meter goles y dar asistencias; solo le falta trasladarlo a la selección. Podemos compararlo con un jugador que le va muy bien en su club pero le cuesta desempeñarse de la misma manera con la casaquilla bicolor: Raúl Ruidíaz. Si bien la 'Pulga' ha metido tantos muy importantes con Perú, estos se han dado a raíz de las diversas oportunidades que ha tenido, muchas más que las que ha tenido Benavente. Pero no sabemos si tendrá esas chances antes de la Copa del Mundo y estas sean suficientes para ser uno de los llamados por Gareca para afrontar este torneo. ¿Quién sabe? Con un par de lesionados y más goles en su cuenta, el 'Chaval' podría convertirse en uno de los elegidos a representarnos en la cita mundialista que iniciará este junio en Rusia.
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