Corte especializada en bancarrotas de Manhattan se pronunciará sobre esta petición el 15 de febrero, 11 días antes de la celebración de la gala de los Óscar.
La empresa de fotografía Eastman Kodak, en suspensión de pagos desde el día 19 de enero, solicitó hoy poner fin al contrato de patrocinio del teatro de Hollywood que lleva su nombre donde se entregan los Óscar desde hace una década, informó The Wall Street Journal.
La compañía buscó amparo en los tribunales para terminar con el acuerdo que firmó en 2000 y por el que se bautizaba Kodak al famoso teatro durante los siguientes 20 años a cambio de 75 millones de dólares.
Los gestores de Kodak confían en que, debido a su crítica situación económica, los jueces les concedan el permiso para romper ese contrato.
El magistrado Allan L. Gropper, de la Corte especializada en bancarrotas de Manhattan, en Nueva York, se pronunciará sobre esta petición de Kodak en una vista fijada para el 15 de febrero, apenas 11 días antes de la celebración de la 84 edición de la gala de los Óscar.
"Los deudores han evaluado el contrato en consulta con sus asesores profesionales y determinaron que cualquier beneficio asociado con esos derechos es probable que no supere o iguale el coste asociado", se explicó en la documentación entregada en los juzgados.
El teatro Kodak forma parte del área comercial y de ocio llamada Hollywood & Highland, por su ubicación en la esquina del bulevar de Hollywood y la calle Highland, cuya obra supuso una inversión de 94 millones de dólares.
Las instalaciones, propiedad de la inmobiliaria CIM Group, se inauguraron en noviembre de 2001 y el teatro acogió su primera ceremonia de los Óscar en marzo de 2002.
En caso de que los tribunales eximan a Kodak de seguir patrocinando el teatro, su nueva denominación dependería de la gestión de CIM Group que podría buscar un nuevo socio que quisiera reemplazar el hueco dejado por la marca fotográfica.
"Eso es algo entre CIM y quien sea que ellos consigan. No es una decisión de la Academia (de Hollywood)", dijo su presidente, Tom Sherak, a la revista Variety.
La organización de los Óscar, no obstante, tiene derecho a vetar el futuro nombre si es que considera que no encaja con la ceremonia de premios.
Paralelamente, la Academia y CIM Group se encuentran en conversaciones para determinar si los Óscar continúan celebrándose en el teatro Kodak más allá de 2013.
La constructora AEG Group, propietaria del teatro Nokia y el Staples Center, pabellón deportivo donde juegan Los Angeles Lakers, suena entre las interesadas para hacerse con el contrato, que supondría el traslado de los Óscar desde Hollywood hasta el centro de la ciudad de Los Ángeles.
Eastman Kodak, con alrededor de 130 años de historia a sus espaldas, se acogió el 19 de enero al Capítulo 11 de la Ley de Bancarrotas de Estados Unidos para reestructurar su negocio en vista de su incapacidad para competir en el mercado de la fotografía digital.
EFE
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