Carlos Revilla, el artista detrás del lienzo y los trazos

En el devenir de la historia, la pintura ha adoptado diferentes formas. El pintor Carlos Revilla contribuye al mundo del arte brindando innovadores conceptos y técnicas que revolucionan los conceptos clásicos, en un inicio siguió la tendencia surrealista, que brinda una extensa gama de posibilidades para luego pasar neofigurativismo, que tiene como tema principal los objetos y la realidad cotidiana.

Un artista pasa por diferentes cambios,  a sus 71 años Carlos Revilla se enfoca en el presente, con su fino trazo plasma en sus cuadros temas relacionados al erotismo, la mujer y el vaticinio. Además tiene un especial apego por los paisajes de  la selva y los desiertos de paracas.

La vocación pictórica de Carlos surgió a temprana edad. Al llegar a Europa se preparó durante cinco años en la Real Academia de Bellas Artes de Ámsterdam, en Holanda.

Su tendencia europea esta enriquecida por sus lazos con el Perú, aún cuando se encontraba estudiando en el viejo continente, su primer contacto con el arte peruano se dio gracias a su maestra de pintura,  quien  poseía una colección de arte pre- colombino.

Para todo pintor  lo más difícil y complejo es arribar a un estilo, definir aquella  propuesta que será su guía para pincelar y plasmar  las técnicas e ideas que ha adquirido y que varían  en cada etapa de su desarrollo artístico.

Revilla fue encontrando su camino a través de diferentes momentos. En  sus inicios, al culminar sus estudios en Ámsterdam a la edad de 20 años regresó a Lima y comenzó  pintar retratos.

Años más tarde regresa a Europa, donde  comienza a descubrir su propio lenguaje artístico, en el que se manifiesta su sensibilidad, originalidad y su forma de ver el  mundo. Por un corto tiempo se aboco a la  pintura abstracta y finalmente en el otoño de su vida se inclinó hacia el realismo mágico, corriente artística que presenta  elementos mágicos o situaciones ilógicas.

Sus  obras de arte están cargadas de símbolos que reflejan su mundo interno. Además Revilla se caracteriza por la particularidad de su pintura en el que destacan rostros femeninos que expresan la personalidad y esencia de la mujer,  damas fusionadas con elementos tecnológicos, paisajes y  desiertos 

Para Carlos Revilla, la pintura es un arte que demanda mucha  reflexión y tiempo. Durante largas horas, en la soledad de su taller da paso a su gran imaginación y talento.