El doctor Fernando Maestre da algunos consejos sobre cómo enfrentar la situación de decirle o no a nuestros hijos que son adoptados.
Lo ideal decirle que es adoptado cuando son muy pequeños o cuando son adolescentes. Evitar decirle al niño que es adoptado entre los 5 y 7 años porque son lo suficientemente grandes para sentir dolor, pero no para poder procesarlo.
Por otro lado, al niño se le puede decir que los bebés llegan al mundo de varias maneras. Algunos llegan en el vientre de la mamá y otros llegan en el corazón de la mamá. Y siempre resaltar que se le ama mucho.
En el caso de los adolescentes, se les puede contar con más detalles pero siempre evitar los detalles sórdidos. El niño jamás debe sentir que en un momento no fue querido. Además, hay que decirles que los únicos padres que tiene con aquellos que lo criaron.
Una vez que el niño sabe que es adoptado, puede que el niño lo acepte y no haga nada o que quiera conocer al padre biológico. En este caso hay que ser sincero con el niño o adolescente y no crearle falsas expectativas, pues el padre o madre biológicos puede que no esté preparado en conocerlo.
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