El hallazgo podría explicar la facilidad de los niños pequeños para aprender cualquier lengua.
Los bebés pequeños, de hasta tres meses de edad, son capaces de detectar dependencias complejas entre diversos elementos lingüísticos y de aprenderlas espontáneamente, ha revelado un estudio realizado por investigadores alemanes.
La investigación constató, que esta capacidad es superior en los bebés que en los adultos, lo que podría explicar la enorme habilidad de los bebés para la adquisición del lenguaje.
Sobre el estudio:
• Varios bebés escucharon secuencias de sílabas durante veinte minutos. Mientras las escuchaban se medían sus respuestas cerebrales a través de una electroencefalografía.
• En las secuencias de sílabas éstas aparecían por parejas, pero con una tercera sílaba intercalada. En muchas de las secuencias las sílabas eran correctas, pero en muchas otras había errores.
• No se trataba de palabras, sino de secuencias lógicas de sílabas necesarias para la construcción del lenguaje que los adultos entendían sólo cuando se les instaba a encontrar la trampa.
• Los científicos decidieron además elevar el tono de alguna de las sílabas. Los bebés que reaccionaron ante estos cambios de tono fueron los mismos que identificaron los errores en las sílabas, siendo mayoría.
Conclusiones:
El estudio ha sido publicado en la revista PNAS (Proceedings of the National Academy os Sciencies) de EEUU demuestra que las capacidades auditivas de los bebés y niños pequeños son mayores que las de los adultos, probablemente porque ellos tienen más prisa en aprender un idioma que los mayores.
Los científicos querían conocer los mecanismos que utilizan los bebés al aprender un idioma para comprobar con qué facilidad y velocidad lo hacían y se dieron cuenta que incluso los bebés de tres meses son más capaces de reconocer reglas complejas de un lenguaje hablado que los adultos.
Comparte esta noticia