Desde muy temprano las familias llegaron a la avenida Brasil para presenciar la Gran Parada y Desfile Cívico Militar que sorprendio con un colorido Pasacalle Cultural.Lo que menos faltó durante el desfile fue la comida, diversos platos típicos se ofrecieron en varios puntos cercanos al desfile.
La Gran Parada y Desfile Cívico Militar, que se realiza cada 29 de julio, sorprendió a los asistentes al desfile con la presentación de un colorido Pasacalle Cultural, que reunió a danzantes y músicos, quienes vistieron diferentes trajes típicos de la costa, sierra y selva.
Desde muy temprano las familias llegaron a la avenida Brasil para presenciar el desfile de las diferentes delegaciones militares. Algunos llegaron con banderas, otros se colocaron las camisetas de la selección peruana.
Lo que menos faltó durante el desfile fue la comida. Diversos platos típicos se ofrecieron en varios puntos cercanos al desfile. Los comerciantes ambulantes aprovecharon para vender chalinas rojas y blancas, hasta chocolates en forma de la bandera del Perú.
Diversos animales captaron la atención de los asistentes, entre ellos, un perro vestido de rojo y blanco, así como dos llamas con coloridos trajes, con quienes el público no escatimó en tomarse fotos.
Aparte de los distintos destacamentos de la Fuerzas Armadas y la Policía Nacional, participaron en el desfile delegaciones extranjeras de Argentina, Bolivia, Chile y México, cuyos oficiales, suboficiales y cadetes marcharon a paso marcial.
Al término del desfile, el presidente Martín Vizcarra se acercó a saludar al público bajo fuertes medidas de seguridad. Durante la Parada Militar, Vizcarra rompió el protocolo y decidió estar de lado de su familia para el espectáculo montado por los bailarines del Ministerio de Cultura.