Los opositores a las uniones gays salieron a protestar en París contra la propuesta de ampliar los derechos de las parejas del mismo sexo.
Miles de personas se han congregado en París para volver a protestar contra el matrimonio homosexual en Francia.
Los opositores a las uniones gays salieron a protestar contra la propuesta de ampliar los derechos de las parejas del mismo sexo, que ahora se está debatiendo en la sociedad francesa.
El ministro del Interior, Manuel Valls, aseguró la víspera de la manifestación que no tolerará "ningún desborde" y culpó de los incidentes del final de la marcha del pasado domingo a "grupúsculos" de extrema derecha que estuvieron presentes el año pasado en las manifestaciones contra el matrimonio homosexual.
En particular, se especula que pronto los cónyuges del mismo sexo no solo podrán adoptar niños, sino también recurrir a los servicios de las madres de alquiler o recurrir a un método de inseminación artificial.
Los protestantes arremeten además contra la enseñanza en las clases de una asignatura experimental sobre el "género" introducida en el sistema escolar que ha generado polémica.
Las protestas son, en palabras de la presidenta de la "Manif pour tous", Ludovine de La Rochère, de lanzar "un aviso al Gobierno" para advertir sobre proyectos en curso que sus detractores consideran "una amenaza".
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