Se mantiene hasta nuestros días en San Andres de Tupicocha, en la cuenca alta de Lurín y está dando grandes beneficios en la producción agrícola de la zona.
En San Andrés de Tupicocha, ubicada en la cuenca alta del río Lurín en la provincia de Huarochirí, se mantiene hasta nuestros días una técnica ancestral del manejo del agua que puede ser replicada en otras cuencas del país para asegurar la sostenibilidad del recurso.
Se llama “Amunas” que viene del vocablo quechua “retener” que consiste en recolectar el agua de la lluvia, en las alturas, filtrarlas en las rocas a través de acequias amunadoras y recogerlas meses después mediante manantiales.
Esta tecnología, combinada hoy con técnicas modernas como la construcción de represas, y el riego tecnificado, ha dado paso a una exitosa experiencia de gestión del agua que está dando grandes resultados en esta parte de la sierra de Lima y que está haciendo de esta zona un polo de desarrollo agrícola.
Sus pobladores que tienen a la agricultura y ganadería como su principal fuente de ingreso y que padecían por agua, dado que solo la tenían tres meses al año, ahora pueden tener más cosechas y mejorar su calidad de vida.
Este proyecto que desarrolla la Municipalidad de San Andrés de Tupicocha, cuenta con el asesoramiento técnico del Proyecto Desarrollo Territorial y Generacion de Empelo de la Cuenca de Lurón, del entro Global para el Desarrollo y la Democracia (CGDD) y es auspiciado por el Banco Interamericano de Desarrollo.
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