Agencia de la OMS relaciona uso de celulares con el desarrollo de tumores cerebrales malignos, en quienes utilizan el teléfono móvil por más de 30 minutos diarios.
En un comunicado, la Agencia Internacional de Investigación del Cáncer (IARC, en inglés) – dependiente de la OMS- señaló como “posiblemente cancerígenos” para los humanos, los campos electromagnéticos generados por las radiofrecuencias de los teléfonos.
La Agencia sostiene que el uso de celulares impacta en el surgimiento específico de glicomas, un tipo de tumor cerebral maligno.
La información se basa en un estudio que detectó -hasta 2004- un incremento de 40% en el riesgo de glicoma entre los usuarios del teléfono celular por más de 30 minutos diarios.
Los expertos, reunidos en Lyon, Francia, llegaron a esa conclusión luego de examinar múltiples evidencias obtenidas a través de estudios epidemiológicos.
El análisis comprendió "todos los estudios relevantes" de personas que utilizan teléfonos celulares y están expuestas a campos electromagnéticos en su lugar de trabajo.
Sin embargo, en el comunicado de la OMS se asegura que aunque exista la "asociación positiva", no se pueden excluir otros factores y no se puede establecer claramente qué produce cáncer en humanos.
Según la IARC, será necesario que se realice una "investigación adicional" en el largo plazo.
"La mayoría de los estudios existentes no ha encontrado vínculos entre los teléfonos y el cáncer. Si existiera tal relación, es poco probable que sea significativa", dijo Ed Yong, miembro de la organización benéfica de Reino Unido Cancer Research UK.
Según Yong, el riesgo de cáncer cerebral es similar en las personas que usan teléfonos celulares y en las que no los utilizan.
"Aún no se ha investigado lo suficiente como para descartar por completo un riesgo. Todavía hace falta indagar en los efectos a largo plazo del uso de teléfonos celulares", añadió.
Tras la divulgación del informe, la organización sin fines de lucro Mobile Manufacturers Forum (MMF) -que agrupa a compañías como Motorola, Nokia y Samsung- emitió un comunicado en el que resalta que la investigación no es definitiva.
Por su parte, Christopher Wild, director de la IARC, aseguró será necesario que se realice una "investigación adicional" en el largo plazo, tomando en cuenta las posibles consecuencias que una afirmación como ésta podría tener en la salud pública (la OMS estima que existen 5.000 millones de suscripciones a teléfonos celulares en el mundo).
Por lo que recomendó que hasta el momento en que se disponga de dicha información, "se deberán tomar medidas pragmáticas para reducir la exposición, tales como utilizar dispositivos de manos libres o enviar mensajes de texto", concluyó Wild.
Comparte esta noticia