Las erupciones solares que afectan al campo magnético de la Tierra y cuyas ondas han obligado a desplazar algunos aviones comerciales cuya ruta sobrevolaba los polos, seguirán intensificándose.
Un poderoso destello en la superficie del Sol, agitada por su periódica temporada de tormentas, envió oleadas de plasma y partículas cargadas que alcanzarán la Tierra, informó hoy el Centro de Predicciones Climatológicas Espaciales (SWPC, por su sigla en inglés).
El SWPC, operado por el Servicio Meteorológico Nacional, indicó que el destello, de clase X1.1, las más poderosas de las erupciones solares, ocurrió a las 04.13 GMT del lunes.
Se espera que la onda expansiva de plasma y partículas solares alcancen la Tierra en dos o tres días y que, posiblemente, incremente las auroras boreales.
Las erupciones solares que afectan al campo magnético de la Tierra y cuyas ondas han obligado a desplazar algunos aviones comerciales cuya ruta sobrevolaba los polos, seguirán intensificándose, según los expertos.
El Sol pasa por ciclos regulares de actividad y cada 11 años aproximadamente la actividad se intensifica y ocurren tormentas que a veces deforman e incluso atraviesan el campo magnético de la Tierra.
Los expertos han indicado que la actual temporada de tormentas es la más intensa registrada desde septiembre de 2005 y, lo mismo que provocan efectos visuales únicos como las auroras boreales, también afectan a las comunicaciones y por tanto a los aviones.
Esto implica además a las redes de transmisión de electricidad, las comunicaciones radiales y los sistemas de satélites, aunque la NASA ha asegurado que los astronautas de la Estación Espacial Internacional (EEI) no corren peligro.
En enero los científicos detectaron dos destellos en el curso de cuatro días seguidos por ondas expansivas de miles de millones de toneladas de plasma desplazándose a unos 8 millones de kilómetros por hora.
La onda causada por el segundo de los dos destellos alcanzó la Tierra unas 34 horas después del destello, en lugar de los dos o más días que habitualmente demora ese desplazamiento.
EFE
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