Los más jóvenes -una cuarta parte de los cuales son chicas- han sido inscritos en programas de formación profesional como ingeniería eléctrica, administración, mecánica o carpintería.
Unos 400 menores que fueron reclutados por grupos armados en Somalia han sido puestos en libertad y reinsertados a través de programas educativos y de formación profesional, informó hoy Unicef.
La organización, que lleva a cabo un proyecto desde hace quince meses en este conflictivo país del Cuerno de África, explicó que en el grupo figuran 110 niños, que ya han sido matriculados en la escuela ordinaria.
Los más jóvenes -una cuarta parte de los cuales son chicas- han sido inscritos en programas de formación profesional como ingeniería eléctrica, administración, mecánica o carpintería.
"Hemos logrado importantes avances para asegurar que los niños no sean reclutados por grupos armados pero nuestro trabajo continuará hasta que todos los niños estén protegidos de esta terrible amenaza", aseguró el representante de Unicef en Somalia, Steven Lauwerier, en un comunicado.
"El uso de niños en los conflictos viola los derechos más fundamentales de los menores", condenó Lauwerier.
Unicef estima que en la actualidad hasta 5.000 niños y jóvenes podrían ser combatientes, porteadores o cocineros para grupos armados en Somalia.
Por eso, durante los últimos meses, la organización ha trabajado con las ONG, la sociedad civil y las comunidades para mejorar su papel de prevención y denuncia mediante la presentación de informes sobre violaciones, reclutamiento o uso de niños soldados.
El Gobierno de Somalia firmó en 2012 un Plan de Acción para poner fin al reclutamiento y prevenir la utilización de niños en los conflictos armados, según reflejó el Informe Anual del Secretario General de Naciones Unidas sobre niños y conflictos armados.
"Estamos dispuestos a apoyar al Gobierno para traducir su compromiso en acciones concretas y beneficiar así a estos niños para que tengan un futuro por delante", afirmó el enviado especial de la Unión Europea para Somalia, Michele Cervone.
El grupo terrorista Al Shabab, que en 2012 anunció su adhesión formal a Al Qaeda, lucha para instaurar un Estado islámico de corte wahabí en Somalia, donde controla algunas partes del país.
EFE
Comparte esta noticia