Estudio pudo determinar una ecuación, que analiza "de manera combinada por primera vez" los factores de riesgo de obesidad infantil.
Un estudio promovido en Francia que combina por primera vez los factores de riesgo de sobrepeso desde el nacimiento ha alcanzado una fórmula para predecir la obesidad infantil y combatirla, informaron los investigadores.
El estudio fue realizado por el CNRS (Centro Nacional de la Investigación Científica) francés, la Universidad de Lille y el Instituto Pasteur de Lille en un equipo internacional coordinado por Philippe Froguel, del laboratorio Genómico y de enfermedades metabólicas.
Este equipo analizó una muestra de 4.000 niños fineses nacidos en 1986, quienes fueron estudiados desde su nacimiento hasta la adolescencia (16 años), y se complementó con otra de 1.500 niños italianos y 1.000 estadounidenses, mejorando así la eficacia de la fórmula con la incorporación de características socio-culturales de cada población.
Gracias a este seguimiento de los menores se pudo determinar la ecuación, que analiza "de manera combinada por primera vez" los factores de riesgo de obesidad infantil, aseguraron los científicos.
Esos factores son el índice de masa corporal de los progenitores antes del embarazo, el peso de la madre durante la gestación, el del recién nacido, la profesión de las madres fumadoras durante la gestación y el número de hijos de la familia.
Para calcular el porcentaje de obesidad predicho por la ecuación se pueden introducir estos parámetros en el enlace http://www.files-good.ibl.fr/childhood-obesity.
Las conclusiones del estudio finés revelaron que un 80 por ciento de las familias de la muestra presentaban un mayor riesgo de obesidad infantil, mientras que el 25 % de ellas pudieron enmendarla a tiempo gracias a la predicción facilitada por la fórmula.
Los científicos hicieron especial hincapié en este asunto ya que la obesidad en los niños comienza a menudo muy pronto, antes de los cinco años, y "una vez instalada es difícilmente curable", por lo que "la prevención es la mejor estrategia para luchar contra esta epidemia y debe ser lo más temprana posible".
El estudio reveló igualmente que, en contra de lo que se creía hasta ahora, el factor genético no merece formar parte de la ecuación debido a su "rol menor en la predicción de la obesidad común", pero sí se señaló que un 5 % de los casos de obesidad severa en los niños se debe a mutaciones genéticas, entre otras anomalías.
Todos estos datos que se desprenden de la fórmula permiten a los profesionales de la salud como médicos, pediatras, dietistas o psicólogos "concentrar sus esfuerzos" en los niños que presentan los riesgos más elevados, apuntó el equipo del Profesor Forguel, así como informar a las familias para poder combatir la obesidad infantil a tiempo.
EFE
Comparte esta noticia