La Copa del Mundo fuera de las canchas ha puesto, en equipo contrario, a dos ganadores mundialistas, con la camiseta amarilla.
El mundial fuera de las canchas ha puesto, en equipo contrario, a dos ganadores mundialistas, con la camiseta amarilla. Con la misma malla que ambos lucieron como campeones.
Para Romario Souza Da Silva, el recordado “O Baixinho”, monarca el 94, hoy diputado por Rio de Janeiro, todos se están enriqueciendo con el torneo.
Entre, los denunciados por Romario, no deja de lado ni a la presidente Dilma Rousseff. incluyendo, también, una fuerte artillería contra Joseph Blatter, presidente de la FIFA, y Jorome Valcke, el ex entrenador francés, hoy en el cargo de Secretario General de la FIFA. Para Romario ambos tienen la categoría de “ladrones y corruptos”. Implica a un buen número de secretarios de oficinas fiscales.
Al paso, en un principio le salió Ronaldo Luis Nazario de Lima, el recordado “Fenómeno Ronnie” a Romario. Aseguraba todo estar en perfecto orden. Aclaró no ser funcionario del mundial y su apoyo sin alguna costa para nadie. Su argumento defensivo, lo fijó en ser, el torneo mundial, una fiesta del pueblo.
Ronaldo, conocidas algunas cifras entregada por Dilma Rousseff – inversión 3.500 millones de dólares - ha variado su discurso y lamenta que, todo esto, haya llegado “antes que los goles a todo el mundo”.
La población brasileña, según encuesta realizada el año 2008, cuando se obtuvo el mundial, apoyo su realización en un 79%. Hoy esas preferencias solo llegan al 52% y con un deterioro inmenso de responsabilidad divulgado en todos los idiomas.
Las manifestaciones públicas, el Gobierno brasileño las justifica “como disidencias por parte de jovenes manifestantes".
Para los detractores del mundial la ausencia de inversión en programas de salud y educación se verán muy afectados en el futuro
Las últimas cifras surgidas hablan de una inversión de 12 mil 500 billones de dólares. Un 83% son fondos de los sectores públicos y solo el 4, 2 por ciento de las arcas privadas. La mayor parte esta invertida en aeropuertos y transporte.
Positivo, se han generado 3 millones 600 mil empleos. Un gol de media cancha.
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