Justine Kish pasó un vergonzoso momento en plena lucha producto de la fuerza que hizo para liberarse de una llave.
Justine Kish pasó un embarazoso en una pelea de UFC. No solo perdió el encuentro ante Felice Herrig, sino que en una de las llaves que le hacían tuvo un problema estomacal por hacer mucha fuerza para evitar ser asfixiada. El octágono quedó manchado por unas curiosas manchas que se hicieron virales en YouTube.
Normalmente los luchadores se preparan física y psicológicamente para las peleas y uno de los cuidados más importantes es la dieta. Al parecer esto último, sumado a los nervios hicieron que Justine tuviera un problema intestinal que fue captado por las cámaras del evento.
La peleadora rusa tomó el momento con humor y publicó un mensaje para los aficionados que la apoyaron: "Soy una guerrera y nunca voy a abandonar #ShitHappens jaja volveré pronto".