Conocemos la historia de Nelson Mandela, pero no es el único que salió como un hombre mejor.
Miguel de Cervantes (1547 - 1616)
El entonces recaudador de impuestos fue encarcelado en 1597 por supuestamente haberse apropiado de dinero público. Durante su encierro "engrendró" (según lo dice el prólogo del libro) Don Quijote de la Mancha, su obra más reconocida y un símbolo del castellano.
Galileo Galilei (1564 - 1642)
Galieo escribió "Discurso y demostración matemática, en torno a dos nuevas ciencias" en 1638. Este importante libro fue también su último. En enero de ese mismo año perdió definitivamente la vista.
William Addis (1738 - 1808)
A este empresario se le adjudica la producción del primer cepillo de dientes orientado al consumo masivo. El natural de Londres purgaba condena por causar desórdenes en la década de 1770.
Ahí se dio cuenta de que el método de la época para lavar los dientes (usualmente pasar una tela con sal) era poco efectivo. En la cárcel fabricó el primer cepillo de dientes con un hueso que quedó de su cena y cerdas que se agenció gracias a un guardián. El hombre se hizo muy rico y actualmente su empresa sobrevive bajo el nombre Wisdom Toothbrushes.
David Marshall Williams (1900 - 1975)
Fue encarcelado por disparar a un comisario cuando quiso cerrar su destilería ilegal. Sin embargo, en la prisión recibió herramientas que le permitieron desarrollar armas. La recarga accionada a gas es una de sus invenciones.
Esta permitió crear la carabina M1 Carbine, prominente en las tropas americanas durante la Segunda Guerra Mundial. Sus logros le permitieron a Marshall salir de la cárcel.
Curt Herzstark (1902 - 1988)
A pesar de ser prisionero en un campo de concentración, Curt Herzstark logró crear la calculadora mecánica Curta. Su invención le salvó la vida al ser tratado como un "esclavo de inteligencia".
La calculadora Curta fue una de las más confiables y requeridas hasta que en los setenta se pasó a producir masivamente las calculadoras digitales.
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