Se busca colocar una caja sobre el fallido sistema de prevención de explosiones por el que fluye ahora petróleo al mar.
"Están comenzando este proceso", dijo a la cadena de televisión CNN la asesora en temas energéticos de la Casa Blanca, Carol Browner.
La operación llega después de que BP admitiera durante el fin de semana el fracaso del procedimiento conocido como "top kill", con el que la multinacional buscaba taponar el pozo mediante una inyección de fluidos pesados.
Browner aseguró esperar que el nuevo intento sea capaz de capturar "todo o una cantidad significativa del petróleo", que será trasladado a un barco en la superficie mediante una tubería.
Pero la asesora gubernamental reconoció que el éxito no está asegurado y que de no funcionar podrían fluir al mar hasta 20.000 barriles de crudo.
El derrame se ha convertido en el peor de la historia, una vez que los científicos han corregido sus cálculos, que inicialmente contaban que la fuga equivalía a 5.000 barriles de petróleo al día, y ahora consideran que el crudo que mana del pozo alcanza entre los 12.000 y los 19.000 barriles diarios.
La asesora oficial recordó también que el inicio hoy de la temporada de huracanes hace que la operación sea más arriesgada.
"Hoy comienza la temporada de huracanes y nos han dicho que va a ser activa", afirmó Browner, quien señaló que si un huracán golpea la zona, el barco que tiene que recolectar el crudo no podrá permanecer en el área.
"Esperamos lo mejor pero nos estamos preparando para lo peor, trabajando con los gobernadores y las comunidades para darles lo que necesitan para proteger la costa y restaurar las zonas impactadas", afirmó Browner.
Para llevar a cabo el nuevo procedimiento varios robots submarinos operados mediante control remoto cortarán la tubería ahora insertada sobre el sistema de prevención de explosiones (BOP, por sus siglas en inglés).
El BOP es un sofisticado y pesado conjunto de válvulas instaladas en la cabeza del pozo que debió de haberse activado y sellado el pozo el 20 de abril, cuando se produjo la explosión en la plataforma operada por BP que dio inicio al derrame.
A continuación la multinacional británica colocará sobre el BOP la caja de contención a través de la que canalizará el petróleo y gas a la superficie.
Se espera que la operación dure entre cuatro días y una semana.
Los observadores alertan que si la operación fracasa la extracción de la tubería podría exacerbar el flujo de carburante a las aguas del Golfo.
-EFE
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