Mediante su embajadora ante las ONU, el nuevo gobierno de Estados Unidos anunció que mantendrá las sanciones a Rusia hasta que le devuelvan Crimea a Ucrania.
El gobierno de Estados Unidos condenó este jueves en la ONU las "acciones agresivas" de Rusia en Ucrania y exigió el fin de la actual escalda de la violencia. La declaración fue hecha por Nikki Haley, la nueva embajadora nombrada por Donald Trump para las Naciones Unidas.
"Queremos mejorar nuestras relaciones con Rusia, sin embargo, la crítica situación en Ucrania oriental demanda una condena clara y contundente de las acciones rusas", dijo Haley ante el Consejo de Seguridad de la ONU. Haley dijo que EE.UU. apoya al pueblo ucraniano, "que ha sufrido durante casi tres años bajo ocupación rusa " y aseguró que las sanciones impuestas a Moscú en relación con Crimea se mantendrán hasta que devuelva el control de la península a Ucrania.
Primer discurso. En su primera intervención en una sesión formal del Consejo, la representante estadounidense insistió en que Rusia y los separatistas deben respetar el alto el fuego y hacer todo lo posible para detener la violencia. Haley defendió que la salida al conflicto en Ucrania pasa por implementar al completo e inmediatamente los acuerdos de Minsk, firmados hace casi dos años para poner fin a la guerra. "Cada día que pasa, más gente está en riesgo de morir de frío o por una explosión”.
La embajadora estadounidense se pronunció así en una reunión del Consejo de Seguridad que analizó la actual escalada de la violencia en el este de Ucrania. El presidente ruso, Vladímir Putin, acusó a las autoridades ucranianas de caldear el conflicto en el este del país para poder acercarse al nuevo presidente de EE.UU., Donald Trump, después de haber apoyado a su rival en las elecciones. Kiev denuncia que han sido Moscú y los separatistas prorrusos los que han provocado el actual rebrote del conflicto.
Rusia en Crimea. En febrero del 2014, tras las caída del régimen de Víktor Yanukóvich (2010-14), estallaron protestas prorrusas en Ucrania, sobre todo en la República Autónoma de Crimea, al sur del país. Putin envió tropas a la zona. En marzo, se dio un referéndum en el que el 96% de los participantes votaron por anexarse a Rusia. El despliegue de tropas rusas fue rechazado por otros gobiernos, sobre todo por Estados Unidos y la Unión Europea, y el resultado de referéndum fue desconocido. (Con información de EFE)
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