El secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, aseguró que "los entendimientos" alcanzados por el presidente Donald Trump con los norcoreanos han logrado reducir los riesgos para el país.
Estados Unidos restó el miércoles importancia a la amenaza que representa el misil balístico intercontinental gigante presentado por Corea del Norte en un desfile militar.
En ese desfile realizado el sábado ante el líder norcoreano Kim Jong-un se vio ese misil móvil transportado en un camión de once ejes que, según analistas, es el mayor de combustible líquido conocido hasta ahora en el mundo.
Pero el secretario de Estado, Mike Pompeo, dijo el miércoles que los acuerdos alcanzados por el presidente Donald Trump con los norcoreanos han logrado reducir los riesgos.
Afirmó que solamente mediante pruebas podrá probarse si ese misil funciona.
"Los norcoreanos, sin embargo, no hicieron el año pasado ninguna prueba de misiles balísticos intercontinentales. Lo mismo ocurrió el año previo", dijo Pompeo a periodistas.
"De manera que el acuerdo con Corea del Norte, los entendimientos, si bien no alcanzaron el objetivo final, ciertamente condujeron a una reducción de los riesgos para Estados Unidos en comparación a cómo estaríamos si hubiéramos seguido el camino emprendido por la administración anterior", añadió.
En el Pentágono, el secretario de Defensa Mark Esper recibió a su homólogo de Corea del Sur, Suh Wook, y dijo que ambos aliados aún procuran una "definitiva y totalmente verificada desnuclearización de Corea del Norte".
"Coincidimos en que los programas de misiles nucleares y balísticos de Corea del Norte siguen siendo una seria amenaza a la seguridad y estabilidad de la región y del mundo", dijo.
Corea del Norte no testeó misiles nucleares o de largo alcance desde que Kim Jong-un firmó una declaración conjunta con Donald Trump en una reunión en Singapur en 2018.
Trump, que busca un segundo mandato en las elecciones del 3 de noviembre, se ha vanagloriado reiteradamente de haber evitado una guerra tras las crecientes tensiones generadas por las pruebas misilísticas nucleares norcoreanas.
Pese a que Trump ha dicho que con Kim se "enamoraron", las gestiones diplomáticas se estancaron durante un año y no hay indicios de un acuerdo permanente que termine con el programa nuclear de Pyongyang.
Kim advirtió en un discurso que Corea del Norte no está atada a una autoimpuesta moratoria de pruebas de misiles nucleares y de largo alcance, aun cuando dejó de lanzar amenazas.
Analistas dijeron que el nuevo misil probablemente fue diseñado para portar múltiples ojivas. Si resulta operacional, ese sistema podría romper las defensas misilísticas de Estados Unidos, según especialistas.
(Con información de AFP)
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