De nacionalidad belga, Sax heredaría de su padre su afición por la música y la habilidad para la elaboración de instrumentos musicales.
Google rinde homenaje este viernes a Adolphe Sax, padre del saxofón. Nació un 6 de noviembre de 1814 en Dinant (Bélgica), aunque por esas fechas se encontraba bajo dominio francés. Fue el mayor de once hermanos y heredaría de su padre su afición por la música y la habilidad para elaborar instrumentos musicales.
Sax, tras su formación académica, entró de aprendiz en la fábrica dirigida por su padre, para luego tomar el control de ellas. Al abandonar la empresa familiar por probelmas financieros, viaja a Francia y se establece a orillas del río Sena, para luego establecerse en Paris, dónde presenta los saxofones en público por primera ocasión en 1844, siendo patentados dos años más tarde. Además, es considerado el primer maestro de saxofón de la historia.
La primera obra conocida para saxofón, el sexteto Canto Sagrado, la compuso Héctor Berlioz en 1844 y fue el propio Adolphe Sax quien lo tocó. «Es de tal naturaleza que que no conozco ningún instrumento actualmente en uso que pueda comparársele, a ese respecto. Es pleno, blando, vibrante, de enorme fuerza y susceptible de endulzar», diría por aquel entonces Berlioz.
Al princio fueron aceptados dentro de la música militar, pero poco a poco fueron incorporándose a las bandas sinfónicas, a las big band y al jazz, estilo de musical en el que se convirtió en una de las grandes referencias. Adolphe Sax ideó y creó con sus manos los saxofones, pero los grandes maestros como Charlie Parker (Kansas City, 1920), Lester Young (Misisipi, 1909), Coleman Hawkins (Misuri, 1904), John Coltrane (Carolina del Norte, 1926) o Dexter Gordon (Los Ángeles, 1923) alcanzaron la perfección soplando a través de sus boquillas.
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