La reciente decisión de la CIJ de La Haya que reconoce su independencia avala dicho pedido, según el ministro de Relaciones Exteriores de Kosovo, Skender Hyseni.
"Hemos pedido que se cambie la resolución 1.244 por otra que refleje la nueva realidad de Kosovo", dijo el jefe de la diplomacia kosovar a la salida de una reunión del Consejo sobre la situación en esa región de los Balcanes.
En su opinión, el reciente dictamen de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre Kosovo despejó cualquier duda sobre la legalidad de la proclamación unilateral de independencia de la provincia serbia hace más de dos años.
Para Hyseni, la mayoría de los 15 miembros del Consejo de Seguridad ha aceptado la opinión del tribunal internacional favorable a Pristina, aunque reconoció que con la oposición de Rusia, que cuenta con el derecho de veto, es imposible cambiar la posición del máximo órgano de Naciones Unidas.
"Estoy seguro que tarde o temprano nos reconocerán todos los miembros del Consejo", agregó.
Por su parte, el ministro de Exteriores de Serbia, Vuk Jeremic, resaltó que ningún miembro del Consejo de Seguridad ha cambiado de posición respecto al estatus de Kosovo tras del dictamen de la CIJ.
Asimismo, reiteró la opinión de Belgrado de que los magistrados eludieron pronunciarse sobre el derecho a la secesión "como cuestión sustancial", sino que se limitaron al contenido técnico de la declaración de la independencia.
En su intervención ante el Consejo de Seguridad, Jeremic resaltó que la resolución 1.244 sigue vigente y que por tanto Kosovo se mantiene oficialmente bajo la tutela del Consejo de Seguridad.
"No buscamos la confrontación con nadie, pero al mismo tiempo no tenemos dudas. No cederemos, ni nos retiraremos", afirmó el responsables de la diplomacia serbia, que ofreció de nuevo a Pristina la posibilidad de reanudar un proceso de negociación.
En ese aspecto, reconoció que "no hay una solución perfecta" al contenciosos, pero abogó por encontrar una salida "equitativa con la que todos" puedan estar de acuerdo.
El embajador de Rusia ante la ONU, Vitaly Churkin, se alineó con el contenido del discurso de la delegación serbia y rechazó de plano la petición kosovar de cambiar la resolución 1.244.
"Ya saben cuál es la correlación de fuerzas en el Consejo de Seguridad, así que les aconsejo que no aguanten la respiración esperándolo", afirmó.
Precisamente fue el veto ruso el que puso fin en 2007 a los intentos de EE.UU., Francia y Reino Unido, entre otros, de adoptar una nueva resolución que pusiera a Kosovo en el camino hacia la independencia.
Hasta ahora, 69 países, entre ellos EE.UU. y la mayoría de socios de la UE, han dado su apoyo a la soberanía kosovar, mientras que naciones como España, Rusia, China, Brasil e India se han negado a hacerlo.
EFE
Video recomendado
Comparte esta noticia