El multimillonario Elon Musk también ha expresado su apoyado a un activista británico de extrema derecha y al partido ultraderechista Alternativa para Alemania.
Elon Musk, el hombre de confianza del presidente electo estadounidense Donald Trump, extiende su influencia política en Europa en beneficio de la extrema derecha, calentando el ambiente en el Reino Unido y Alemania.
En su cuenta de X – red social de la cual es dueño –, el multimillonario pidió la dimisión del primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, y apoyó la liberación del activista británico de extrema derecha Tommy Robinson. También ha dicho que Nigel Farage no está capacitado para seguir liderando el partido antiinmigración Reform UK.
Asimismo, el aliado clave de Donald Trump mencionó el jueves en X un caso de explotación sexual de más de 1 500 niñas en el norte de Inglaterra entre 1997 y 2013, en el que se culpó a las autoridades de no haber tomado medidas.
"En Reino Unido, delitos graves como la violación requieren la aprobación de la fiscalía antes de que la policía pueda acusar a los sospechosos. ¿Quién estaba a cargo del CPS (la fiscalía general del Estado) cuando a las bandas de violadores se les permitía explotar a niñas sin enfrentarse a la justicia? Keir Starmer", escribió.
En esos mensajes, el magnate sudafricano arremetió también contra la secretaria de Estado británica Jess Phillips, encargada de la protección y violencia contra las mujeres y niñas, tildándola de "apologista del genocidio por violación", además de llamarla "bruja malvada".
Los ataques comenzaron después de que Phillips rechazara una petición para que el Gobierno liderara una investigación pública sobre la actividad de explotación infantil detectada en la localidad inglesa de Oldham.
Starmer defendió este lunes a la secretaria de Estado británica Jess Phillips de quienes "propagan mentiras y desinformación", en referencia a los ataques verbales de Musk a su colega.
Según dijo hoy Starmer en su intervención al ser preguntado por la polémica, "aquellos que propagan mentiras no están interesados en las víctimas".
El líder laborista consideró que "a la mayoría de la gente le interesa más lo que ocurre en el NHS -sistema sanitario público- que lo que pasa en Twitter (por X)".
"Aquellos que están atacando a Jess Phillips, a quien estoy orgulloso de llamar colega y amiga, no están protegiendo a las víctimas. Jess Phillips ha hecho mil veces más que lo que estos podrían soñar cuando se trata de proteger víctimas de abusos sexuales", apuntó.
Canciller alemán le responde a Elon Musk
Por su parte, el canciller alemán y candidato a repetir en el cargo por el Partido Socialdemócrata (SPD) en las elecciones generales de febrero, Olaf Scholz, recalcó que los alemanes no dejarán influenciarse por las declaraciones "erráticas" del multimillonario Elon Musk, quien le insultó a él y al presidente germano y apoyó abiertamente al partido ultraderechista Alternativa para Alemania (AfD).
"Alemania es una democracia fuerte y estable. Aquí lo que cuenta es la voluntad de los ciudadanos, no las declaraciones erráticas de un multimillonario estadounidense. Hay que mantener la calma", escribió en la red social X, precisamente propiedad de Musk.
Tras el atentado de Magdeburgo el pasado 20 de diciembre, el multimillonario tecnológico escribió en X que Scholz debía "dimitir inmediatamente" y que era un "tonto incompetente".
Musk también calificó al presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, de "tirano antidemocrático", después de que este se pronunciara en contra de la influencia exterior durante su discurso sobre la disolución del Bundestag o Cámara Baja hace unos días.
Esto después de que Musk apoyara abiertamente en esta red social a AfD, la cual, sostuvo, es la "única" fuerza que puede "salvar a Alemania".
Noruega y Francia también responden
Mientras tanto, el primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, expresó su preocupación por los recientes comentarios de Elon Musk acerca de la situación política en otros países como Alemania.
"Creo que es preocupante que un hombre con un acceso enorme a las redes sociales y grandes recursos económicos se meta de forma tan directa en los asuntos internos de otros países. No es así como debería ser entre democracias y aliados", declaró Støre a la televisión pública noruega NRK.
A su turno, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, acusó el lunes a Musk de apoyar a "una nueva internacional reaccionaria" y de interferir en las elecciones, particularmente en Alemania.
"Hace diez años, si nos hubieran dicho que el dueño de una de las redes sociales más grandes del mundo apoyaría una nueva internacional reaccionaria e intervendría directamente en las elecciones, incluso en Alemania ¿quién lo hubiera imaginado?", dijo el mandatario francés al referirse al apoyo del magnate tecnológico estadounidense al partido de extrema derecha alemán AfD.
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