Un grupo de hackers, que se identifica como Silent Crow, se atribuyó junto con Ciberpartizany BY la autoría de un ataque contra la "infraestructura informática" de Aeroflot en un comunicado publicado en Telegram.
El fallo en los sistemas informáticos de la compañía aérea rusa Aeroflot, que la obligó hoy a cancelar medio centenar de vuelos, fue producto de un pirateo informático, según informó la Fiscalía General de Rusia en su página web.
"Como resultado de la investigación, se abrió una causa penal por un delito tipificado en el punto 4 de artículo 272 del Código Penal de la Federación de Rusia (acceso no autorizado a información informática)", señala el comunicado
Un grupo de hackers, que se identifica como Silent Crow, se atribuyó junto con Ciberpartizany BY la autoría de un ataque contra la "infraestructura informática" de Aeroflot en un comunicado publicado en Telegram.
"Durante un año, estuvimos dentro de su red corporativa, desarrollando metódicamente el acceso, profundizando en el núcleo mismo de la infraestructura", aseguró Silent Crow.
Aeroflot ajusta horarios de vuelos
Los piratas informáticos aseguran que consiguieron destruir cerca de 7000 servidores, físicos y virtuales, y obtener 12 TB de información de bases de datos.
"Todos estos recursos son ahora inaccesibles o están destruidos, y restaurarlos costará quizás decenas de millones de dólares. El daño es estratégico", resumieron.
Aeroflot informó a su vez que los pasajeros de vuelos cancelados pueden pedir el reembolso de los billetes o gestionar una nueva reserva para vuelos en los próximos diez días.
La compañía, que inicialmente informó de la cancelación de 42 vuelos y luego añadió la de otros siete, advirtió a los pasajeros de que sus oficinas en el aeropuerto moscovita Sheremétievo, base de Aeroflot, no están funcionando temporalmente.
Antes de comunicar el fallo de sus sistemas informáticos, Aeroflot declaró que continúa ajustando los horarios de los vuelos debido a la restricciones de operaciones impuestas por las autoridades en Sheremétievo debido a los ataques con drones de los pasados día 20 y 21.
Los ataques ucranianos con drones contra la capital rusa, que se suceden casi a diario, obligan a suspender las operaciones de los aeropuertos moscovitas, con los consiguientes retrasos y pérdidas millonarias.