Cónsul General de Perú en Valencia, Liseth Nalvarte, señaló que los 50 peruanos afectados por terremoto en Murcia cuentan con carpas donde guarecerse.
La Cónsul General de Perú en Valencia (España), Liseth Nalvarte, comunicó que la gran mayoría de viviendas de la comunidad peruana en Lorca (Murcia) se encuentran con una calificación de punto rojo, es decir, nuestros connacionales no pueden ingresar ni siquiera para recoger sus pertenencias.
La diplomática precisó que en la ciudad residen 130 peruanos, cuando en toda Murcia son aproximadamente 1.200. Además, señaló que gran parte del primer grupo habita en viviendas alquiladas.
En diálogo con RPP Noticias, comunicó que las autoridades españolas declararon que el 60% del total de casas en la ciudad son habitables, mientras que al 28% es posible ingresar para salvar algunas cosas.
Nalvarte comentó que personal del consulado se desplazó ayer hasta la zona dañada para gestionar el cobijo para los peruanos desplazados, quienes noches anteriores durmieron al aire libre. Del total de 50 afectados, 30 se encuentran en el campamento de Huerto de la Rueda y otro pequeño grupo se encuentra en La Viña.
En el caso de la primera gran tienda, nuestros compatriotas comparten asilo con otras 1.500 personas, el 90% de ellos son inmigrantes. Asimismo, indicó que el caso de María Olga Sánchez (70) y de su esposo Bernardino Ítalo Baca (80), resaltado por la prensa internacional, también ha sido resuelto.
De los peruanos en Lorca, solo 4 se encuentran sin trabajo aunque aún reciben subsidio de desempleo. De los económicamente activos, el 80% se dedica a la agricultura y el resto a la construcción.
La cónsul Comunicó que el martes acudirán nuevamente a la ciudad para observar la evolución de la crisis.
Testimonio de peruanos
Luis Prada Benavides, residente en Loca, confirmó que, por ejemplo, su piso se encuentra inhabitable. “Veo que hay grietas, está muy deteriorado. Da miedo vivir allí”, dijo a RPP Noticias.
Informó también que hasta antes del apoyo del consulado de Valencia dormía en cartones sobre el suelo, ahora duermen en camas de la Cruz Roja en el campamento del Huerto de la Rueda. Por lo menos un mes continuarán en el refugio, agregó.
Su compañero de vivienda, Freddy Ismael Vallejos Rivera, contó que nunca antes había vivido un terremoto con el del pasado 11 de mayo. A su turno, Julio César Oropeza Rojas refirió que su cuarto “para habitar no está”.
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