La Unión Americana de Libertades Civiles afirmó que este es un paso que ayudará a proteger a los residentes de Arizona contra la identificación racial y la discriminación.
Diversas organizaciones estadounidenses de defensa de los derechos civiles aplaudieron la decisión de una jueza federal de bloquear partes de la Ley de Inmigración de Arizona y dijeron que la sentencia destruye "el montaje anticonstitucional" de ese estado.
El director ejecutivo de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), Anthony Romero, afirmó a través de un comunicado que "este es un paso adelante que ayudará a proteger a los residentes de Arizona contra la identificación racial y la discriminación".
Romero añadió que "no se puede permitir que la frustración de un sólo estado con la política federal secuestre la autoridad federal o dicte las prioridades federales en formas que impiden la aplicación de la ley, amenaza los derechos de ciudadanos y no ciudadanos y viola el corazón de los valores estadounidenses".
Para Janet Murguía, del Consejo Nacional de La Raza, la jueza (Susan) Bolton, "no sólo se ha puesto del lado de la comunidad latina, sino del lado de la Constitución" y por ello esta es una "victoria inequívoca".
Por su parte, Nina Perales, del Fondo México Americano para la Defensa Legal y la Educación (MALDEF), dijo que "la decisión de hoy destruye el montaje anticonstitucional que Arizona quería establecer".
"La decisión de la jueza además demuestra que (la ley) es un intento anticonstitucional del estado de asumir el sistema federal de inmigración en Arizona. Los estados de toda la nación deberían darse cuenta que esfuerzos similares no tendrán éxito".
Linton Joaquín, del Centro Nacional de Leyes de Inmigración (NILC), señaló que "con la decisión de hoy, la jueza Bolton prohibió algunas de las provisiones más atroces (de la norma), una ley peligrosa que amenaza los derechos fundamentales de innumerables ciudadanos de Arizona y visitantes".
El director de litigios de Asian Pacific American Law Center (APALC), Julie Su, aplaudió a Bolton por "ver el peligro inminente de tener esta ley en vigor" y dijo que la norma habría tenido un efecto devastador entre las poblaciones de origen asiático, del Pacífico, latinoamericanos y otros grupos étnicos de Arizona.
Finalmente, Pablo Alvarado, de la Red Nacional de Jornaleros (NDLON), señaló que "si la historia sirve de guía, el camino a recorrer en Arizona sigue siendo largo".
"El día de hoy significa una parada en ese camino y aunque tenemos una fe completa en el proceso legal para defender la Constitución de EE.UU., no declararemos victoria hasta que la ley sea completamente parada y los derechos civiles de todas las personas de Arizona estén totalmente protegidos".
EFE
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