Esta no es la primera vez que Abdul Waseel hace un retrato con su sangre, ya que en sus paredes cuelgan también los de Mandela y Benazir Bhutto.
Un pintor paquistaní ha pintado con la sangre que se ha ido sacando de sus propias venas un retrato de "Mahatma" Gandhi con motivo de la conmemoración de los 142 años del nacimiento del "padre de la patria" india.
"Esta es la mejor manera de decir a la India y Pakistán que vivamos juntos y olvidemos la hostilidad", dijo a la agencia india IANS el pintor de Lahore (este de Pakistán) Abdul Waseel, que ha presentado hoy su obra en el memorial capitalino dedicado a Gandhi que hay en Nueva Delhi.
"Sé que Gandhi defendió la no violencia, pero al rendirle tributo con mi sangre intento que no se derrame más sangre en las fronteras", añadió Waseel.
Conocido como "el tío pintor" en Lahore, Waseel es propietario en esa ciudad paquistaní de una pequeña tienda, y esta no es la primera vez que hace un retrato con su sangre, ya que en sus paredes cuelgan también los de Nelson Mandela y Benazir Bhutto.
El de Gandhi lo comenzó en el año 2009 y ha ido pintándolo según iba obteniendo sangre de sus venas con jeringuillas.
"La gente reacciona de forma diferente al ver mi tributo. Yo lo que espero es derretir los corazones", explicó el pintor.
El autor ha presentado su obra a una nieta de Gandhi, Tara Gandhi Bhattacharjee, quien acudió al memorial, al igual que hicieron los principales políticos del país y miles de personas admiradoras del legado del "Mahatma" ("alma grande").
Nacido el 2 de octubre de 1869 en el actual estado de Gujarat (oeste de la India), Gandhi cursó estudios de Derecho en Inglaterra y vivió en Sudáfrica antes de liderar la lucha no violenta por la independencia india del Imperio Británico, obtenida en 1947.
Gandhi hizo de la "no violencia" o desobediencia civil una estrategia de lucha contra el Imperio Británico, abogó por acabar con la injusticia perpetuada por el sistema hindú de castas y fue un firme defensor de la armonía interreligiosa.
El aniversario de su nacimiento es un día festivo en la India, y ha sido reconocido internacionalmente como el Día de la No Violencia.
Tras la independencia y partición del subcontinente, India y Pakistán se han enzarzado en varias guerras y conflictos ligados a la soberanía de Cachemira que todavía continúan.
EFE
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