Varios expertos reunidos en la cumbre de Copenhague consideran que la causa principal es la larga distancia que hay que recorrer en avión para llegar hasta el país africano.
El Mundial Sudáfrica 2010 será nueve veces más contaminante que la competición anterior, en Alemania en 2006, a causa de la larga distancia que hay que recorrer en avión para llegar hasta el país, según varios expertos reunidos en la cumbre del clima de Copenhague.
"Esperamos que el impacto sobre el medio ambiente en Sudáfrica sea nueve veces superior al de Mundial alemán", dijo Dorah Nteo, directora de la DEAT, la agencia gubernamental sudafricana del clima en una conferencia de prensa.
La mayor parte del impacto negativo (85%) se debe al transporte aéreo que se utilizará para viajar a Sudáfrica pero también para desplazarse en el interior del país.
Sudáfrica está situada en la punta meridional del continente, una zona muy alejada de los lugares donde se encuentran la mayoría de hinchas de fútbol del mundo (América y Europa) y que tendrán que hacer miles de kilómetros para ver jugar a sus equipos.
Además, las emisiones totales de CO2 generadas por el primer Mundial que se disputa en el continente negro serán el doble de las de los Juegos Olímpicos de Pekín del año pasado, explicó un responsable de la ONU.
"Según nuestras estimaciones actuales, las emisiones totales para el próximo Mundial superarán 2,75 millones de toneladas de CO2. En los Juegos de Pekín fueron de 1,8 millones", dijo Theodore Oben, del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP).
Los 400.000 aficionados que se espera que vayan a Sudáfrica recorrerán unos 7,1 millones de kilómetros en avión para llegar al país organizador y emitirán 1,6 millones de toneladas de CO2, según un documento de la ONU.
Naciones Unidas hizo un llamamiento a los hinchas para que "compensen" económicamente las emisiones de CO2 de sus trayectos en avión y está negociando con las selecciones clasificadas para que hagan lo mismo.
Veinte de los treinta y dos equipos clasificados, incluyendo Francia, Inglaterra, Italia, Brasil y Estados Unidos, no declinaron la oferta, según la ONU.
En total, sumando a los equipos y a los seguidores, la ONU calcula que habría que gastarse 33 millones de dólares (unos 20 millones d"euros) para compensar las emisiones de CO2 generadas por los vuelos internacionales hacia Sudáfrica.
-AFP-
"Esperamos que el impacto sobre el medio ambiente en Sudáfrica sea nueve veces superior al de Mundial alemán", dijo Dorah Nteo, directora de la DEAT, la agencia gubernamental sudafricana del clima en una conferencia de prensa.
La mayor parte del impacto negativo (85%) se debe al transporte aéreo que se utilizará para viajar a Sudáfrica pero también para desplazarse en el interior del país.
Sudáfrica está situada en la punta meridional del continente, una zona muy alejada de los lugares donde se encuentran la mayoría de hinchas de fútbol del mundo (América y Europa) y que tendrán que hacer miles de kilómetros para ver jugar a sus equipos.
Además, las emisiones totales de CO2 generadas por el primer Mundial que se disputa en el continente negro serán el doble de las de los Juegos Olímpicos de Pekín del año pasado, explicó un responsable de la ONU.
"Según nuestras estimaciones actuales, las emisiones totales para el próximo Mundial superarán 2,75 millones de toneladas de CO2. En los Juegos de Pekín fueron de 1,8 millones", dijo Theodore Oben, del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP).
Los 400.000 aficionados que se espera que vayan a Sudáfrica recorrerán unos 7,1 millones de kilómetros en avión para llegar al país organizador y emitirán 1,6 millones de toneladas de CO2, según un documento de la ONU.
Naciones Unidas hizo un llamamiento a los hinchas para que "compensen" económicamente las emisiones de CO2 de sus trayectos en avión y está negociando con las selecciones clasificadas para que hagan lo mismo.
Veinte de los treinta y dos equipos clasificados, incluyendo Francia, Inglaterra, Italia, Brasil y Estados Unidos, no declinaron la oferta, según la ONU.
En total, sumando a los equipos y a los seguidores, la ONU calcula que habría que gastarse 33 millones de dólares (unos 20 millones d"euros) para compensar las emisiones de CO2 generadas por los vuelos internacionales hacia Sudáfrica.
-AFP-
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