El presidente de Argentina pidió la dimisión a Alfonso Prat-Gay, ministro de Economía. Las reformas emprendidas fueron impopulares en ese país.
El presidente argentino Mauricio Macri produjo este lunes un sismo político al relevar al ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat-Gay, con una economía en recesión y reformas impopulares en su primer año de gobierno.
"El Presidente le pidió la renuncia (a Prat Gay). Es un tema de diferencias políticas", anunció el primer ministro, Marcos Peña.
La caída del mayor responsable de la política económica argentina vino también de la mano de una reforma, al ser dividida la cartera en dos y nombrados los economistas liberales Luis Caputo (Finanzas) y Nicolás Dujovne (Hacienda).
La economía acumula en el año un derrumbe de 2,4%, tras los ajustes aplicados por Macri para afrontar un pesado déficit fiscal y atraer inversiones.
Tensión y polarización. La recesión comenzó con la devaluación de 32% dispuesta por Macri al asumir en diciembre de 2015 y se ahondó con una inflación anual de más de 40%, con fuerte caída del poder adquisitivo de los salarios y el consumo, según consultoras económicas.
Macri bajó los impuestos a grandes productores del campo y de la minería, mientras que aumentó la presión tributaria sobre sectores medios y asalariados, incluso con un 'tarifazo' en los precios de la energía. Puso, además, un tope a los reajustes de salarios, que perdieron poder frente a la inflación. Y redujo el presupuesto de ciencia y tecnología.
Siete de cada diez argentinos piensa que Macri "gobierna para los ricos", según una encuesta de la consultora CEOP, del sociólogo Roberto Bacman. (Andina/AFP)
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