El ente cultural de la ONU declaró que el Monte del Templo de Jerusalén solo es tierra de culto para el mundo musulmán. La decisión ha causado indignación en Israel.
El Consejo Ejecutivo de la Unesco, compuesto por 58 países, adoptó este viernes una resolución en la que se niega todo vínculo entre el Monte del Templo de Jerusalén, sitio del Muro de los Lamentos y el judaísmo, limitándose a considerarlo un lugar de culto musulmán, la mezquita de Al Aqsa.
El texto, recibido con mucho desagrado por la delegación de Israel en la organización, solo tuvo 6 votos en contra, aunque 26 países se abstuvieron y dos estuvieron ausentes, frente a los 24 que lo respaldaron. En contra votaron Estados Unidos, el Reino Unido, Alemania, Holanda, Lituania y Estonia, mientras que países europeos, como Francia o España, se abstuvieron.
El texto había sido propuesto por Palestina, apoyada por Egipto, Argelia, Marruecos, el Líbano, Omán, Catar y Sudán, y en el mismo se incluye una enérgica condena a Israel por la gestión de los lugares sagrados de Jerusalén. La resolución desaprueba de forma tajante la actitud de Israel con respecto al acceso al lugar y se refiere a él únicamente como la mezquita de Al Aqsa, calificándolo de lugar único del islam.
ITierra santa. Considerado el tercer sitio más sagrado del islam tras La Meca y Medina, la mezquita fue erigida en el lugar que los judíos consideran que albergaba los dos templos bíblicos, el de Salomón y el de Herodes. Israel, que controla la zona desde que en la Guerra de los seis días de 1967 ocupó la parte oriental de Jerusalén, permite el acceso de los musulmanes a las mezquitas para que puedan orar, si bien en ocasiones se producen restricciones por razones de seguridad que determinan las autoridades israelíes, que sí impiden siempre el paso de los judíos al lugar para evitar posibles altercados. EFE
Comparte esta noticia