“Se cometieron excesos, se cometieron abusos”, reconoció el presidente de Chile, en respuesta a las denuncias de represión durante el estallido social que vive el país.
El presidente de Chile, Sebastián Piñera, dijo este jueves que "en algunos casos no se cumplieron los protocolos de uso de la fuerza para controlar el orden público" y "se cometieron abusos", en relación con las denuncias por represión durante el estallido social que vive el país.
"En algunos casos no se cumplieron los protocolos, no se cumplió la ley, se cometieron excesos, se cometieron abusos... Todo eso está siendo investigado por la Fiscalía y va a ser conocido y juzgado por los Tribunales de Justicia. Así funciona una democracia, así funciona un Estado de derecho", dijo Piñera en una reunión con corresponsales de medios extranjeros.
El presidente fue interpelado acerca de las conclusiones de un informe de Amnistía Internacional (AI) que constató casos de violaciones de derechos humanos cometidos por agentes del Estado que, a juicio de este organismo, "no son hechos aislados o esporádicos", sino que responden a un patrón y muestran un "grado de coordinación" que "conduce razonablemente a pensar en la responsabilidad del mando al más alto nivel".
Piñera comentó que ante los hechos violentos que acompañan al estallido social, fenómeno que desde hace más de un mes moviliza a miles de ciudadanos para reclamar un modelo socioeconómico más equitativo, se ha visto en la encrucijada de proteger el orden público y la vida de las personas y "al mismo tiempo respetar en forma estricta los derechos humanos de todos".
Para lograrlo, explicó que las fuerzas de seguridad siguen las reglas que marca un protocolo de actuación, que fue compartido con el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) de Chile y con diversos organismos de derechos humanos.
Ese protocolo, según contó el presidente, establece varios grados de actuación para el restablecimiento del orden público y la garantía de la seguridad ciudadana y el primero de ellos es la mera presencia de los Carabineros (policía chilena).
Si eso no es suficiente, se recurre al "diálogo", la "disuasión" y el "convencimiento".
El siguiente paso, si lo anterior no funciona, es recurrir a "elementos disuasivos" como los vehículos "lanza aguas o las bombas lacrimógenas".
Y si eso tampoco funciona, "y solamente cuando está en riesgo la vida de las personas, de los carabineros o de los civiles, se pueden usar escopetas que disparan perdigones y que esos perdigones de acuerdo con protocolos deben ser de goma", continuó Piñera. (EFE)
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