El joven deportista estaba navegando junto con su padre en la localidad de Punta Arenas, en Chile, cuando de pronto apareció el gigantesco cetáceo, que lo engulló en cuestión de segundos. Afortunadamente, a los pocos segundos, lo escupió.
Volvió a nacer. Un joven kayakista fue tragado por una inmensa ballena jorobada, cuando navegaba junto con su padre las aguas de la localidad de Punta Arenas, al extremo sur de Chile. Afortunadamente, a los pocos segundos, lo escupió.
Este inusual incidente ocurrió el pasado fin de semana, cuando Adrián Simancas (24) salió a surcar en kayaks las aguas del Estrecho de Magallanes junto con su padre, Dell Simancas (49).
Todo quedó grabado por la cámara instalada en el kayak del padre de la víctima: en las imágenes, se ve que, de un momento a otro, el kayak de Adrián fue engullido por una gigantesca ballena, que apareció desde el fondo de las aguas.
Por unos segundos, Adrián desapareció de la vista de su padre, que no podía creer lo que acababa de ocurrir. Afortunadamente, instantes después, el cetáceo escupió al joven kayakista, que nadó hasta donde se encontraba su padre.
“Pensé que iba a morir”
Si bien este incidente ocurrió el pasado fin de semana, recién este jueves se ha difundido en los medios de comunicación chilenos, mientras que el video del suceso se ha vuelto viral en redes sociales.
En entrevista con la cadena CNN, Adrián Simancas contó lo vivido el pasado fin de semana.
“Cuando volteo, siento en mi cara una textura como babosa, alcancé a ver colores entre azul oscuro y blanco, algo que me encierra y me hunde. En ese momento pensé que ya no podía hacer nada, que iba a morir. No sabía qué era. Estuve un segundo en esa incertidumbre”, rememoró.
“Sentí mucho miedo de que la ballena lo tumbara a él (a su padre), o empezara a dar saltos o a jugar, porque hubiese sido más peligroso. Yo le gritaba: ‘Cuidado, hay algo allá abajo’, pero Dell me decía ‘Tranquilo, tranquilo’. Eso me cambió el chip”, añadió.
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