Las fuerzas de seguridad belgas montaron todo un megaoperativo para intervenir a este joven, “del que le salían cables de la ropa”.
Falsa alarma. Las fuerzas de seguridad de Bélgica detuvieron a un hombre sospechoso de llevar encima explosivos, que resultó ser un estudiante que examinaba las radiaciones en el centro de Bruselas.
Alarma de bomba. Todo comenzó cuando un guardia de seguridad detectó a un individuo “del que le salían cables de la ropa”, lo que movilizó a la Policía belga, que montó un operativo en torno al sospechoso, según el diario belga Le Soir.
Hasta evacuaron la zona. El servicio de desactivación de explosivos del Ejército belga y las fuerzas especiales se desplazaron al lugar, acordonaron la zona y evacuaron edificios aledaños, relató el citado periódico.
Toman medidas. Durante el dispositivo, la Policía pidió a los medios de comunicación y a los ciudadanos que no retransmitieran imágenes en directo, como ya hicieron en operaciones antiterroristas después de los atentados del 13-N en París y los del 22-M en Bruselas.
Se desviaron rutas de buses. La circulación de metro se vio afectada y varias líneas de autobús no circularon alrededor de la zona sobre la que se ha estableció el perímetro, informó la empresa de transportes de Bruselas (Stib).
Todo por un estudiante que estaba haciendo su tarea.
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