El vehículo autónomo golpeó a una mujer de 30 años que estaba cruzando la calle. Según la empresa que realiza las pruebas en Viena, la joven caminaba distraída mirando su celular.
Un autobús no tripulado, desarrollado por la startup francesa Navya, atropelló a una peatona durante las pruebas realizadas en Viena, Austria. De acuerdo con el portal Bloomberg, las pruebas de esos vehículos autónomos fueron suspendidas mientras dure la investigación del incidente.
El autobús que viajaba a una velocidad de 12 km/h golpeó una mujer de 30 años que estaba cruzando la calle y resultó con heridas leves.
La empresa Navya, citando a los testigos del incidente, dijo que en el momento del incidente una mujer estaba cruzando la calle con audífonos puestos, mirando el teléfono. Otros detalles del incidente aun no han sido especificados.
Los autobuses de Navya han sido probados por las autoridades de Viena desde el 6 de junio de 2019. Hasta que acabe las indagaciones sobre el incidente, las autoridades dejaron de probar los vehículos autónomos.
Otros incidentes con vehículos no tripulados
Este no es el primer accidente de tráfico que involucra al autobús no tripulado de Navya. En noviembre de 2017, durante las pruebas de la ruta para vehículos autónomos, el autobús no pudo evitar la colisión con un camión. Como resultado, el camión estrelló su parachoques con la rueda del bus.
La investigación sobre las causas de este incidente terminó a mediados de julio de 2019. Investigadores revelaron que la razón principal fue que el controlador de Xbox, utilizado para manipular el bus por parte de un operador asistente, se encontraba guardado en un lugar cerrado dentro de la cabina.
En marzo de 2018, un vehículo no tripulado, probado por Uber, mató a un peatón que cruzaba la calle por la noche en el lugar prohibido. Más tarde, investigadores revelaron que el auto detectó al peatón seis segundos antes de la colisión y 1.3 segundos antes de que decidiera frenar. Sin embargo, el sistema de frenado de emergencia fue apagado intencionalmente por los ingenieros de Uber.
Esta noticia ha sido publicada originalmente en N+1, ciencia que suma.
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