El balance provisional de esta tragedia es de 39 muertos y dieciséis heridos, doce de ellos graves, según la Delegación del Gobierno en Génova.
La Fiscalía de Génova ha abierto una investigación para esclarecer las causas del derrumbe el martes de un tramo de un puente en esa ciudad italiana, que ha causado al menos 39 muertos, y teme que la razón haya sido "un error humano".
"No ha sido una fatalidad, sino un error humano", dijo el fiscal general de Génova, Francesco Cozzi, a la televisión pública Rai.
El fiscal explicó que la investigación tratará de responder a "una sola pregunta, ¿por qué ha sucedido?": "Este es nuestro objetivo y para lograrlo haremos todo lo que sea necesario", agregó.
El balance provisional es de 39 muertos y dieciséis heridos, doce de ellos graves, según la Delegación del Gobierno en Génova.
En torno a las 12.00 hora local (10.00 GMT) del martes, un tramo de unos cien metros del puente Morandi, que tiene un kilómetro de longitud y una altura de 90 metros, se vino abajo y sepultó bajo los escombros a varios vehículos.
La retirada de escombros continúa, en el área trabajan mil agentes, entre bomberos, policía municipal, estatal, miembros de protección civil y equipos de emergencia que buscan posibles supervivientes y limpian la zona con la mayor celeridad posible.
El Gobierno italiano se ha trasladado a Génova para mantener una reunión extraordinaria y decidir qué medidas tomar.
Exigen renuncias
De momento, el ministro de Infraestructuras, Danilo Toninelli, exigió la dimisión de los directivos de la concesionaria Autoestrade per l'Italia, filial de Atlantia y responsable del mantenimiento del puente, después de que la compañía comunicara que estaba trabajando para asegurar el pavimento.
El ministro del Interior, Matteo Salvini, dijo que lo mínimo que puede hacer el Ejecutivo es retirar la concesión a la compañía.
"Una compañía, como la que maneja ese tramo de autopista, que genera miles de millones de ganancias, debe explicar a los italianos por qué no ha hecho todo lo posible para reinvertir una parte de esas ganancias en seguridad", declaró a la emisora Radio 24.
El directivo de la compañía Stefano Marigliani garantizó hoy en declaraciones a la Rai que las labores estaban siendo supervisadas y que no había elementos que advirtieran de un inminente peligro, por lo que no descartan "ninguna hipótesis". (EFE)
Comparte esta noticia