Las autoridades de Polonia han iniciado este martes la construcción de una verja electrificada en la frontera con el enclave ruso de Kaliningrado.
El ministro polaco de Interior, Mariusz Kaminski, anunció este martes el comienzo de la electrificación e instalación de vigilancia electrónica en la frontera polaco-rusa correspondiente al enclave de Kaliningrado (norte).
En una rueda de prensa en Varsovia, Kaminski explicó que actualmente hay una barrera con tres filas de vallas y alambradas a lo largo del perímetro fronterizo y que hoy han dado comienzo los trabajos de cimentación de postes y el tendido de cables de alta tensión para asegurar la frontera.
La portavoz de la Guardia Fronteriza polaca, Anna Michalska, informó a la prensa de que se planea dividir en 12 sectores los aproximadamente 200 kilómetros de la frontera que comparten Rusia y Polonia, y que antes del final de septiembre estarán funcionando 3.000 cámaras de vídeo controladas de manera remota y se habrán electrificado 700 kilómetros de vallas.
Este martes, operarios de la empresa polaca Telbud, a quien se encargó también la construcción del muro fronterizo con Bielorrusia, comenzaron a trabajar en las zonas de Bezledy y Sepopol (norte) y pronto dará comienzo la construcción del centro logístico y de mando de todo el dispositivo fronterizo, ubicado en Ketrzyn (norte).
Presupuesto
Según los datos facilitados por el gobierno polaco, el presupuesto de todo el proyecto asciende a unos 80 millones de euros.
"Esta inversión garantizará la detección de delincuencia fronteriza, en particular la migración no regulada y el contrabando de mercancías", aseguró la teniente Michalska.
Varsovia sella la frontera
El 2 de noviembre de 2022, Varsovia decidió "sellar la frontera" que comparte con Rusia en la región de Kaliningrado y levantar "de manera inmediata" una barrera triple de vallas y alambradas de 2,5 metros de alto que posteriormente será sustituida por un muro.
Todos los trabajos relacionados con esta decisión se han acelerado para poder completarse en antes de octubre de este año, en lugar de diciembre, como se previó en principio.
Al igual que ocurrió en el caso de la frontera con Bielorrusia, el Gobierno polaco ha aplicado en Kaliningrado una ley de seguridad fronteriza de noviembre de 2021 que impide el acceso a las cercanías de esta barrera a cualquier persona que no pertenezca a los cuerpos de seguridad del Estado.
Con información de EFE.
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