Consuelo Córdoba sufrió en 2001 la desfiguración de su rostro al ser atacada con ácido por su exesposo.
Una mujer que se iba a someter este mes a la eutanasia desistió del suicidio asistido tras hablar con el papa Francisco, que visitó Colombia recientemente. El sumo pontífice permaneció 5 días y llevó a cabo 29 actividades entre misas campales, encuentros con autoridades, con jóvenes, víctimas del conflicto, religiosos y sus familias.
Consuelo Córdoba sufrió en 2001 la desfiguración de su rostro al ser atacada con ácido por su exesposo. Ella ha sido sometida a 87 operaciones, pero aún le quedan 6 más, ya que no puede consumir alimentos sólidos, solamente puede ingerir líquidos.
Encuentro con el papa. La mujer acudió el jueves 7 de septiembre a la sede de la Nunciatura Apostólica, donde el papa latinoamericano se alojó con el propósito de recibir la bendición del pontífice y explicarle las razones de su determinación.
Consuelo relató que no creía que el encuentro se pudiera dar, pero que sorpresivamente uno de los escoltas la sacó de entre el público y la llevó delante de Francisco. "Le dije que quería morir y que el 29 de septiembre me aplicaban la inyección porque ya todo estaba listo", expresó Córdoba en una entrevista con el canal de televisión Caracol.
Cambia de opinión. Tras el breve encuentro, que culminó con un abrazo, cambió su decisión y ahora descarta la eutanasia. Además, se someterá a cirugías con el apoyo de donantes para mejorar sus condiciones de vida. "Voy a decirle al doctor que muchas gracias por la inyección, pero que se la aplique a otro", dijo.
La mujer también pidió ayuda para salir de la miseria en la que vive ya que solo tiene para sostenerse un bono de unos 30 dólares.
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