Hamás dice que esta admisión confirma una "clara" coordinación entre bandas "vinculadas al Estado Islámico" y el Ejército de Israel para "crear crisis humanitarias" en Gaza.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, ha reconocido tácitamente la entrega de armamento a una banda criminal vinculada a una tribu de la Franja de Gaza opuesta al Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), después de que el opositor y exministro de Defensa, Avigdor Lieberman, acusara al Ejecutivo de armar a elementos "vinculados a Estado Islámico" en el enclave.
"Israel actúa para derrotar a Hamás a través de varias vías, a recomendación de los jefes del aparato de seguridad", ha dicho la oficina del primer ministro de Israel en un breve comunicado publicado tras las acusaciones de Lieberman, antiguo aliado de 'Bibi' y líder del partido Yisrael Beitenu.
Lieberman ha indicado en una entrevista concedida a la emisora pública israelí, Kan, que "el Gobierno israelí está dando armas a un grupo de criminales y delincuentes, que se identifican con Estado Islámico, por orden del primer ministro", antes de agregar que cree que "esto no contó con la aprobación del gabinete".
"El jefe del Shin Bet tiene constancia, pero no sé hasta qué punto el jefe del Estado Mayor del Ejército es consciente de ello", ha manifestado, en aparente referencia a miembros del clan Abú Shabab, opuesto a Hamás y que opera en los alrededores del paso fronterizo de Kerem Shalom, bajo control israelí.
Hamás: esta admisión confirma la coordinación entre bandas e Israel
Hamás ha señalado que esta "admisión oficial confirma lo revelado por los acontecimientos sobre el terreno en los últimos meses", en referencia a la "clara coordinación entre bandas de ladrones y colaboradores de la ocupación, con el propio Ejército enemigo, para saquear la ayuda y crear crisis humanitarias que exacerban el sufrimiento de nuestro pueblo asediado".
"Estas declaraciones confirman que el Ejército (de Israel) no se conforma con bombardeos y masacres, sino que organiza y patrocina directamente operaciones de robo y hambruna a través de estas bandas colaboradoras, en un intento por quebrantar la voluntad de nuestro pueblo e influir en su entorno de resistencia", reza un comunicado recogido por el diario 'Filastín', vinculado al grupo.
En este sentido, Hamás ha remarcado que la denuncia de Lieberman sobre entregar armas al clan Abú Shabab "revela una verdad cruda y peligrosa", puesto que tiene "el objetivo de crear un estado de caos social" y "promueve proyectos de ocupación para generar hambruna y el robo sistemático de ayuda humanitaria".
Este clan ha sido acusado en el pasado de llevar a cabo saqueos de ayuda humanitaria en la Franja de Gaza y las especulaciones sobre un apoyo israelí a este grupo llevan circulando varias semanas, en medio del refuerzo de sus actividades en la zona en plena ofensiva de Israel contra Gaza.
De hecho, el clan abrió hace pocos días una cuenta en la red social X en el que anunció la creación de las Fuerzas Populares de Palestina con el objetivo declarado de "resolver la crisis de hambre, refugio y dignidad", mientras que Hamás ha acusado a Abú Shabab de saquear camiones de ayuda y mantener lazos con Israel.
"Hacemos un llamamiento a los líderes de Hamás y les damos una última oportunidad para alcanzar una solución que ponga fin a esta crisis catastrófica", señaló, al tiempo que acusó al grupo islamista de la "horrible masacre" de palestinos tiroteados por las fuerzas israelíes durante una entrega de ayuda en Rafá.
En este sentido, el clan afirmó que el suceso fue causado por "la difusión de rumores e información engañosa sobre falsos puntos de distribución de ayuda", tras lo que publicó un vídeo pidiendo a los residentes que volvieran a Rafá para recibir alimentos, medicina y cobijo.
Asimismo, han circulado vídeos en redes sociales en los que miembros del clan de Abú Shabab visten uniformes militares con la bandera palestina e insignias en las que se puede leer "unidad antiterrorista", tras asegurar que controlaban una zona "liberada" de Hamás por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI).
La ofensiva de Israel, lanzada tras los ataques perpetrados el 7 de octubre de 2023 por Hamás y otras facciones palestinas --que dejaron unos 1 200 muertos y cerca de 250 secuestrados, según el Gobierno israelí--, ha causado hasta la fecha más de 54 650 muertos y 125 500 heridos, tal y como han denunciado este jueves las autoridades gazatíes, controladas por Hamás.
Te recomendamos
Video recomendado
Comparte esta noticia