
Cincuenta de los 62 palestinos que murieron durante los enfrentamientos con el Ejército Israelí el pasado lunes en la Franja de Gaza pertenecían al grupo islamista Hamás y los demás eran civiles, informó Salah Bardawil, responsable del grupo.
En una entrevista con el noticiero palestino Baladna, en la que le preguntaron por qué la facción usa a civiles para su beneficio particular, Bardawil contestó que -"no se pude decir que Hamás recoge los frutos y empuja a la gente a morir, cuando 50 de sus miembros han muerto".
El portavoz del movimiento, Fawzy Barhum, aseguró a la agencia AFP que pagarán los funerales de esos 50 muertos y que dará una compensación económica a los deudos. Según el ejército israelí, el uso de fuego real en la frontera fue necesario para impedir la infiltración masiva de activistas.
Los palestinos de Gaza acudieron a la frontera el lunes, por un lado para denunciar el traslado de la embajada estadounidense a Jerusalén y por otro para conmemorar la huida de sus territorios en la guerra de 1948, cuando nació Israel.
El resultado fue la jornada más mortífera en el conflicto palestino-israelí desde la guerra de Gaza de 2014. Hamás, que mantuvo tres guerras contra Israel desde 2008, apoyaba la movilización asegurando que era una iniciativa civil y pacífica.
La tensión permanece alta en la zona, y este miércoles tanques israelíes dispararon contra tres posiciones de Hamas, en respuesta a disparos provenientes de las mismas, según un comunicado del Tsahal (ejército israelí).
Según la BBC, Israel, Estados Unidos, Canadá, Japón, la Unión Europea y Egipto, consideran a Hamás como una "organización terrorista", por su amplio historial de ataques contra objetivos israelíes y a su compromiso de destruir ese estado que está explícito en su acta fundacional.
(Con información de AFP)