El ministro iraní de Exteriores, Abbas Araqchi, confirmó que la instalación nuclear de Fordo sufrió "daños graves" tras los ataques estadounidenses del 22 de junio, mientras Teherán evalúa la magnitud del impacto y suspende la cooperación con el OIEA.
La central nuclear de Fordo, una de las instalaciones clave del programa nuclear iraní, sufrió "daños graves" a causa de los bombardeos ejecutados por Estados Unidos el último 22 de junio, según confirmó el ministro de Exteriores de Irán, Abbas Araqchi, en una entrevista con CBS News.
"Nadie sabe con exactitud qué ha ocurrido en Fordo. Dicho esto, lo que sabemos hasta ahora es que las instalaciones han sufrido daños graves", afirmó el ministro iraní.
Araqchi subrayó que aún no hay información precisa sobre el alcance de los daños, pero destacó que Irán cuenta con la capacidad tecnológica para retomar sus actividades de enriquecimiento de uranio.
"No se puede aniquilar la tecnología y la ciencia sobre el enriquecimiento mediante un bombardeo", aseguró, enfatizando que la industria nuclear iraní es de desarrollo local y no depende de tecnología extranjera.
El ataque a Fordo se produjo en el marco del conflicto que estalló el pasado 13 de junio, cuando Israel lanzó una ofensiva militar contra Irán, a la que este respondió con misiles y drones. Estados Unidos se sumó al conflicto el 22 de junio con bombardeos a tres instalaciones nucleares iraníes, incluyendo Fordo, Natanz e Isfahán. Desde el 24 de junio rige un alto el fuego, pero las tensiones persisten.
Tras los ataques, el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que los bombardeos "borraron completa y totalmente" el programa nuclear iraní.
Sin embargo, fuentes estadounidenses citadas por el Washington Post indicaron que aún se necesita tiempo para evaluar completamente el impacto de los bombardeos. Por su parte, comunicaciones iraníes interceptadas, según el mismo medio, habrían minimizado los daños.
El ministro también recordó que el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, emitió un edicto religioso que prohíbe el desarrollo de armas nucleares, reafirmando el compromiso de Irán con un programa nuclear exclusivamente pacífico.
Programa nuclear "orgullo y gloria nacional" de Irán
Araqchi resaltó la resistencia de la industria nuclear iraní, que, aseguró, ha enfrentado sanciones internacionales, sabotajes y asesinatos de científicos en las últimas dos décadas.
"Nuestro pueblo ha soportado mucho en los últimos 20 años, durante los cuales Irán ha sido sometido a fuertes sanciones debido a su programa nuclear pacífico", afirmó.
Además, destacó que el programa nuclear es un motivo de "orgullo y gloria nacional" y que Irán seguirá defendiendo su carácter pacífico ante la comunidad internacional.
El ministro también recordó que el líder supremo iraní, el ayatolá Alí Jamenei, emitió un edicto religioso que prohíbe el desarrollo de armas nucleares, reafirmando el compromiso de Irán con un programa nuclear exclusivamente pacífico.
Suspensión de la cooperación con el OIEA
El presidente de Irán, Masoud Pezeshkian, aprobó este miércoles una ley que suspende la cooperación con el Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), según informó la televisión estatal iraní Press TV.
La legislación prohíbe la entrada de inspectores del OIEA a Irán, salvo que se garantice la seguridad de las instalaciones nucleares y las actividades nucleares pacíficas, y estará sujeta a la aprobación del Consejo Supremo de Seguridad Nacional de Irán.
Esta decisión responde a la creciente tensión entre Irán y el OIEA, especialmente tras los ataques de Israel y Estados Unidos. Teherán critica al organismo y a su director general, Rafael Grossi, por no condenar los bombardeos, que considera una violación del Tratado de No Proliferación (TNP) y del derecho internacional.
Irán también está considerando prohibir la entrada de Grossi al país, acusándolo de emitir informes con "motivaciones políticas" que habrían servido de pretexto para los ataques.
Esta decisión se da cuando la Organización de Energía Atómica de Irán (OEAI) realiza una evaluación detallada de los daños, cuyo informe será presentado al Gobierno iraní.