El grupo denominado Project Jonah busca mantener a las ballenas varadas frías y en buena salud hasta que suba la marea en la noche, cuando intentarán reflotarlas. En total 40 ballenas fueron avistadas en la zona.
Un grupo ecologista intenta salvar a una gran manada de ballenas que se quedaron varadas en unas aguas poco profundas frente a la Península de Coromandel, en Nueva Zelanda.
"Fueron avistadas unas 40 ballenas y desgraciadamente 25 se quedaron varadas", indicó el portavoz del grupo ecologista Project Jonah.
A través de su cuenta de Facebook indicaron que junto a personal del Departamento de Conservación neozelandés estaban ayudando a los vecinos de la zona con las ballenas que permanecían cerca de la orilla.
El trabajo se extenderá hasta las 9 de la noche (hora local) cuando subirá la marea. Hasta entonces continúan en el lugar junto a los voluntarios.
Al respecto, el director de Project Jonah, Darren Grover, explicó a los periodistas que estaban intentado mantener a las ballenas frías y en buena salud y que intentarían reflotarlas por la noche, con la marea alta.
Las ballenas piloto, que pueden llegar a tener más de seis metros de largo, suelen quedarse varadas y más de 376 de ellas murieron de ese modo en Australia el mes pasado.
(Con información de AFP)
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